El Congreso de los diputados ha aprobado una iniciativa a través de la cual da un plazo de tres meses al Gobierno para poner en marcha “de forma efectiva” el marco aprobado por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud el pasado mes de julio para la Vigilancia Nacional de la Resistencia Antimicrobianos.
La proposición no de ley presentada por el PSOE, fue aprobada por todos los grupos, salvo Vox, después de que se aceptaran las enmiendas transacionales de Podemos y Partido Popular. Quedaron fuera las medidas, en relación a la ampliación de recursos para poner en marcha las medidas, que fue presentada por el grupo nacionalista.
Finalmente la proposición no de ley recoge cuatro puntos en los que se solicita al Gobierno, en primer lugar poner en marcha las citadas medidas. Esta cuestión lleva aparejada la “aprobación de la normativa para la creación de la Red Nacional de Vigilancia en Salud Pública, que se incluirá las infecciones relacionadas con la asistencia sanitaria y las resistencias a los antimicrobianos como problemas de salud dentro del Sistema de Vigilancia de las Enfermedades Transmisibles”.
Igualmente plantea el impulso de las medidas incluidas en el Plan Nacional de Resistencia a los Antibióticos (PRAN), en colaboración con las CC.AA., sociedades científicas y colegios profesionales vinculados.
Entre estas medidas destacan la monitorización del consumo de antibióticos, en cumplimiento de la normativa europea; la vigilancia en sanidad animal de microorganismos patógenos clínicos, para mejorar el conocimiento de la situación epidemiológica y permitir una prevención temprana en el desarrollo de resistencias; la mejora del uso de los antibióticos mediante la generalización de los Programas de Optimización de Uso de Antibióticos (PROA), en hospitales, Atención Primaria y centros sociosanitarios; promover la investigación y la formación y además promover la formación continuada relacionada con la prevención y el uso prudente de los antibióticos. En este sentido, la proposición no de ley recoge el impulso, “dentro del marco One Health la formación continuada tanto de profesionales sanitarios, como de todos los colectivos profesionales vinculados, por parte de los servicios públicos correspondientes, guiados por intereses científicos y de servicio público, en colaboración con las Comunidades Autónomas”.
La iniciativa parlamentaria demanda también al Gobierno de España a que “desde la colaboración con las CC.AA. se favorezca la incorporación de novedades terapéuticas en el área de antimicrobianos”, en ese sentido solicitan que exista “en todo momento un correcto posicionamiento de las nuevas terapias en los programas de optimización de antibióticos y la equidad en el acceso”.
Por último la pnl pide facilitar la incorporación de los nuevos antimicrobianos “al arsenal terapéutico mediante la evaluación acelerada de las nuevas moléculas de esta clase terapéutica”.
Desde el PSOE, su portavoz Ana Prieto recordó que la iniciativa parlamentaria se enmarca en el contexto de que España “es uno de los países europeos que más antibióticos consumo” y que la aparición y propagación de infecciones de bacterias resistentes al tratamiento con antibióticos es una de las amenazas “más graves a las que se enfrenta la salud pública”.
Por su parte el popular Juan Callejas valoró muy positivamente la aprobación de la iniciativa y demandó además que el Gobierno debería cuantificar el impacto de la vacunación en las tasas de resistencia antimicrobiana en España y a actualizar el calendario vacunal “como medida profiláctica para evitar la aparición de resitencias”,
Por su parte, Podemos demandó que “la formación continuada dependa de los servicios públicos de salud”.
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Carmen Martínez, portavoz del Grupo Socialista en la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados: 
Margarita de la Pisa, eurodiputada de Vox.: 
Ion Arocena, director general de la Asociación Española de Bioempresas (Asebio): 
Javier Padilla, secretario de Estado de Sanidad: