Unir esfuerzos y poder poner en común estrategias y medidas que mejoren la situación de la farmacia rural actual es el objetivo que ha reunido este fin de semana en el I Congreso Nacional de Farmacia Rural a numerosos farmacéuticos rurales de toda España en Alicante. Bajo la organización de la Asociación de Farmacéuticos Rurales de la Provincia de Alicante (Afarpa) y la Sociedad Española de Farmacia Rural (Sefar), el objetivo del encuentro es analizar la situación actual del sector y abordar los principales desafíos en las zonas rurales de nuestro país.
Manuel Olivert, presidente de Afarpa ha destacado que el objetivo claro de este encuentro es potenciar el papel de la farmacia rural como motor de cohesión territorial y desarrollo socioeconómico y, sin duda, como pilar de nuestra salud pública. “Espero que este encuentro sirva para afianzar la viabilidad de la farmacia rural y con ello, ayudar a la estabilidad y el fortalecimiento del mundo rural en su conjunto, traduciéndose en una mejora para el que todos nos debemos, lo más importante y que no es otro que: Nuestro Paciente”. ”Un encuentro pionero que marcará muy posiblemente un antes y un después para los farmacéuticos comunitarios rurales y, por sus futuras repercusiones, para la farmacia en general”, asegura el presidente de Afarpa.
Durante la jornada del sábado se ha celebrado la mesa ‘Sumando fuerzas: el papel del farmacéutico comunitario en Atención Primaria’, moderada por Yolanda Riquelme, farmacéutica comunitaria y vicepresidenta de Afarpa, en la que se ha analizado la necesidad e importancia de que el farmacéutico esté presente en el seguimiento del paciente para mejorar su atención, evolución y adherencia al tratamiento. “Pensamos que nuestro papel es importante ya que tenemos una visión completa de sus enfermedades y de los distintos tratamientos que les prescriben los médicos de atención primaria y de especialidades, así como de su situación personal, familiar y social. Para que esta información ayude al paciente necesitamos formar parte del equipo de atención primaria junto con el médico y la enfermera de nuestros núcleos rurales”, ha explicado Riquelme.
En este mismo debate ha participado Gonzalo Adsuar, presidente de la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria de la Comunidad Valenciana (Sefac), para aportar su visión a este posible modelo asistencial: “Considero que el farmacéutico comunitario es una pieza clave en la transformación y fortalecimiento de la Atención Primaria. Su cercanía, accesibilidad y conocimiento experto en el uso seguro y eficaz de los medicamentos lo convierten en un profesional esencial para mejorar la continuidad asistencial, especialmente en zonas rurales donde el sistema sanitario requiere mayor cohesión. Desde Sefac abogamos por una integración real del farmacéutico comunitario en los equipos multidisciplinares de salud, con reconocimiento formal de su papel, colaboración estructurada con otros profesionales y el desarrollo de una especialidad propia en Farmacia Comunitaria que respalde su labor asistencial. Sumar fuerzas en Atención Primaria es imprescindible, y la farmacia comunitaria está preparada para ser parte activa de la solución”.
Despoblación y envejecimiento
La despoblación y envejecimiento de las zonas rurales, el relevo generacional y la falta de rentabilidad hacen que muchas farmacias rurales vean comprometida su continuidad. Las farmacias rurales desempeñan un papel crucial en la salud de la población de estas zonas, proporcionando no solo medicamentos, sino también atención farmacéutica personalizada, asesoramiento y, en muchos casos, el único acceso a servicios sanitarios, contribuyendo a la educación en salud, la prevención de enfermedades y el seguimiento de tratamientos en colectivos vulnerables.
“El problema es que el modelo de planificación es incoherente con el modelo de retribución y necesitamos una solución. Necesitamos cambiar el modelo de retribución, que este modelo sea diferente en la farmacia rural o establecer un sistema de compensación para permitir su viabilidad. En este último caso hay modelos en otros países como Italia que facilitan a las farmacias de menos de 3.000 habitantes ayudas desde la administración y el sector para mejorar sus ingresos y asegurar su sostenibilidad. En España estamos trabajando para poder establecer este fondo en el que el Ministerio de Sanidad ya nos ha mostrado su apoyo”, ha explicado Jaime Espolita.
Por último, durante el Congreso se ha destacado el papel que representa la distribución farmacéutica para hacer llegar los medicamentos a todos los rincones de España en tiempo récord. Tal y como han destacado los expertos este servicio permite el acceso equitativo a todos los medicamentos y asegurar que todos los ciudadanos en España, vivan donde vivan, puedan disponer su medicación. “Gracias a las distribuidoras podemos disponer cada día de todos los fármacos necesarios para nuestros pacientes, lo que nos permite dar un servicio de calidad a nuestros pacientes rurales. Tenemos las mejores cooperativas y la mejor logística en distribución farmacéutica a nivel mundial”, ha concluido Irene González Orts, presidenta del Comité Organizador del Congreso y secretaria de Afarpa.