Gilead ha informado de la selección, por parte del Instituto de Salud Carlos III, de un total de 18 proyectos, de los 68 presentados, para la V edición de sus Becas a la Investigación Biomédica 2017, un programa dotado con 900.000 euros, que sumados a las cuantías de las ediciones anteriores supone una inversión de 3,8 millones por parte de la compañía, los cuales han servido para financiar 80 proyectos de 33 instituciones sanitarias.
Tras la entrega de las ayudas a los 18 proyectos seleccionados, relacionados con el VIH, la hepatitis y la hemato-oncología, la vicrepresidenta y directora general de Gilead en España, María Río, recordó que "el programa 'Gilead Fellowship' surgió en nuestro país con un claro objetivo: fomentar la investigación en centros asistenciales sanitarios de España en áreas terapéuticas de gran relevancia". En este sentido, reconoció que "la colaboración del Instituto de Salud Carlos III y las asociaciones científicas es fundamental para garantizar la excelencia del certamen".
También participó en el acto José Antonio Pérez Molina, presidente de Gesida, que apuntó el diagnóstico precoz y la prevención como asignaturas pendientes en VIH y Sida, y por eso dio la bienvenida a "iniciativas como las becas de Gilead”, por su contribución a la I+D en este ámbito. Por su parte, María Buti, vicepresidenta de la Asociación Española para el Estudio del Hígado (AEEH), agradeció el "estímulo" que este programa supone, "especialmente para los grupos de investigadores jóvenes que pueden proyectarse a nivel internacional”.
Por último, Jordi Sierra, presiente de la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH), reconoció que, en tiempos de dificultades financieras para la investigación en hematología, son este tipo de iniciativas las que han permitido "desarrollar proyectos de alto nivel en caracterización molecular de las neoplasias linfoides y en abordar la medicina personalizada en pacientes mayores con leucemia linfática crónica”.
Durante la celebración del acto también hubo lugar para homenajear al Plan Nacional del Sida (PNS), que cumple 30 años desde su creación. "Hay que destacar que en estos 30 años, el VIH ha pasado de ser una patología mortal a convertirse en casi crónica si el paciente es tratado de forma adecuada", señalan desde Gilead.