La ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, María Luisa Carcedo, aprovechó su participación en la inauguración del XXII Congreso Nacional de Informática de la Salud 2019 para poner en valor la culminación del mapa de la interoperabilidad en España, que, dijo, "es ya un hecho gracias al esfuerzo de todas las comunidades autónomas, independientemente de su color político, y del Ministerio".
Carcedo recordó que el ciclo que se abrió en 2006, cuando se puso en marcha la interoperabilidad, formada por el sistema común de identificación personal, la historia clínica y la receta electrónica, un ciclo que, dijo, se ha cerrado en estos días, tras la certificación del sistema de la Comunidad de Madrid para que pueda iniciar la puesta en marcha del servicio de receta electrónica. "Lo hemos hecho", dijo, "con el concurso de todos los gobiernos autonómicos y el ámbito profesional sanitario", y desde el Ministerio indican que han participado en el proyecto unas 30 sociedades científicas del campo de la salud, del derecho sanitario y la bioética, así como la sociedad civil.
Desde Sanidad opinan que con la culminación del proyecto se está contribuyendo a la calidad asistencial, facilitando el acceso a los servicios y prestaciones sanitarias y favoreciendo una gestión racional de los recursos. "La continuidad asistencial cuando los ciudadanos se desplazan por todo el territorio nacional debe estar asegurada", ha insistido la ministra, quien ha remarcado la idea de que "la tecnología por sí sola no produce una transformación" del sistema, sino que es la reorientación de éste para aprovechar el potencial de las tecnologías la que lo hace.
No obstante, no rehusado valorar la "especial contribución de la tecnología digital a que el Sistema Nacional de Salud (SNS) sea una organización más eficaz, mantenga un alto nivel de calidad y aproveche todos los márgenes de eficiencia en la utilización de los recursos públicos", y ha opinado que las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación "son esenciales" para mejorar el funcionamiento de los sistemas de salud.
Aplicación en la Atención Primaria
Carcedo ha puesto también el foco en la aplicación de las nuevas tecnologías en la Atención Primaria, con ejemplos prácticos como el intercambio y uso compartido de información clínica entre centros y profesionales; la prescripción en pacientes crónicos; la telemedicina; los sistemas de citas, o las propias relaciones con los pacientes. En este sentido, ha admitido la necesidad de "analizar nuestra organización sanitaria de cara a mejorar su desempeño, revisar los escenarios asistenciales tradicionales, identificar lo que se pueda haber quedado caduco tras la constante transferencia de responsabilidades entre profesionales, niveles y dispositivos".
Finalmente, ha abogado por asumir los riesgos que pueda implicar la transformación digital en el panorama de la asistencia sanitaria. A este respecto, ha señalado que "no puede ser de otra forma tratándose de un interés superior, como es la protección de la salud y, tratándose de bienes públicos, lo que obliga a basarse lo máximo posible en la evidencia".