La falta de suministro de medicamentos en España “tocó techo en 2019”, según los datos presentados por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) en el 21º Congreso del Sector Salud de AECOC.
Según ha destacado el jefe de departamento de inspección y control de medicamentos de la Agencia Española del Medicamento (Aemps), Manuel Ibarra, tras pasar de 576 notificaciones en 2013 a 1.700 en el año anterior a la pandemia, en 2020 las alertas por problemas de suministro de medicamentos en España se situaron en 1.561, lo que supone una caída de. 8,2% respecto a los datos del año anterior.
“Durante las primeras semanas de la crisis sanitaria se vivieron momentos críticos, con stock de días para medicamentos necesarios en las UCIs, pero se pudo salvar la situación gracias a la colaboración con toda la cadena de suministro”, asegura Manuel Ibarra.
Entre las medidas que se activaron al inicio de la pandemia para evitar el desabastecimiento de productos, Ibarra ha destacado ”los procesos de reorientación en las plantas de producción, la búsqueda de fuentes alternativas de principios activos para los medicamentos o el incremento de las importaciones para satisfacer el incremento de la demanda”.
Más allá del contexto generado por la pandemia, Ibarra ha destacado el papel del Plan de Garantías de Abastecimiento de la Aemps para detener el aumento de los problemas de abastecimiento de medicamentos en el país. “Gracias al plan se han creado medidas regulatorias para la detección temprana, políticas sancionadoras y de control del suministro de medicamentos esenciales, a la vez que se han detectado alternativas terapéuticas para ciertos medicamentos y se ha mejorado la coordinación con otros países de la UE para solucionar las vulnerabilidades que existen en la cadena de suministro, como la dependencia excesiva de terceros países en la producción”.
En la identificación de las causas de la falta de suministro, antes de la pandemia los motivos más comunes eran problemas de fabricación (35% de los casos), la capacidad de plantas (24%) y el aumento de la demanda sobre ciertos medicamentos (15%). La pandemia incidió sobre alguno de estos factores y, en 2020, las notificaciones causadas por incremento de la demanda crecieron hasta el 24% de los casos.
Ibarra ha destacado que las notificaciones sobre problemas de abastecimiento de medicamentos siguen a la baja y, en lo que llevamos de 2021, se han reportado 643 casos.
Colaboración con el CGCOF
Una de las herramientas que ayudan a la Aemps en la detección temprana de problemas de suministro de medicamentos es el proyecto de colaboración impulsado por el Consejo General del Colegio de Oficiales Farmacéuticos (CGCOF) en colaboración con otras instituciones farmacéuticas europeas para el intercambio de información sobre la cuestión.
El proyecto monitoriza la actividad del 41% de las farmacias españolas y, según los datos presentados por el vicepresidente del CGCOF, Juan Pedro Rísquez, en 2020 se detectaron 181 medicamentos con problemas de suministro en estos centros.
Según los datos recopilados en el proyecto, la mitad de los medicamentos notificados al inicio de la pandemia por incidencias de suministro estaban indicados para el sistema nervioso (33% de los casos) y respiratorio (17%).
Rísquez ha destacado el papel de los farmacéuticos a la hora de minimizar los problemas de suministro. “Nueve de cada diez casos de falta de medicamentos los solucionan los propios profesionales de las farmacias, que ponen a disposición de los pacientes alternativas médicas”.
El ‘home delivery’ entra en el sector salud
Tal y como ha ocurrido en otros sectores, la pandemia también ha sido un acelerador de tendencias en la salud. Así, en el último año han crecido servicios de conveniencia, como el home delivery. En el Congreso del Sector Salud de Aecoc, el jefe de servicio de farmacia del Hospital Universitario Virgen Macarena de Sevilla, Miguel Ángel Calleja, ha detallado el crecimiento del servicio durante la crisis sanitaria. “Antes, el envío de medicamentos a domicilio era residual, pero durante los primeros meses de la pandemia se extendió a todos los pacientes. La telefarmacia ha venido para quedarse, porque mejora tanto la atención como los resultados clínicos”, ha afirmado.
Calleja ha detallado que, más que envíos a domicilio, la telefarmacia evoluciona para ofrecer diferentes opciones de envío a los pacientes y, en este contexto, las farmacias comunitarias juegan un rol esencial. “En marzo se empezó el envío a domicilio a todos los pacientes, pero ya desde el mes de abril, el 95% de las entregas de medicamentos se hacen en las farmacias”. El portavoz hospitalario también ha remarcado que la pandemia “ha demostrado que la telefarmacia es posible, pero también que requiere de muchos recursos”.
El director de ‘suply chain’ de Alliance Healthcare, Javier de la Viuda, ha coincidido en que las farmacias jugarán un rol esencial en el envío de medicamentos hospitalarios. “Las farmacias comunitarias son la primera línea de atención del paciente y cuentan con su confianza”.
De la Viuda ha concedido que el ‘home delivery’ sigue teniendo un peso “residual” en número de envíos, pero que es un servicio de gran valor que, sin embargo, tiene diversos retos para su desarrollo. “Es necesario adecuarse al marco regulatorio, garantizar la sostenibilidad laboral y medioambiental y generar modelos con sentido económico para las empresas”.
Finalmente, el director de cadena de suministro de Cofares, Rubén Orquín, ha presentado los tres modelos de envío de medicamentos hospitalarios que tiene la compañía: la entrega a domicilio, el click&collect en farmacia hospitalaria y el e-commerce para productos de parafarmacia. “La clave del éxito en estos modelos es responder a la demanda de conveniencia de la sociedad, que reclama recoger sus medicamentos allí donde le vaya mejor, ya sea en su domicilio o en su farmacia más cercana”.