Biológicos: la farmacia pide un papel por el paciente y por su sostenibilidad

La oficina de farmacia tiene mucho que ofrecer en el abordaje integral de las enfermedades, incluso en aquéllas tratadas con medicamentos biológicos. Su proximidad a los pacientes, sus habilidades y capacidades son herramientas que la farmacia debe poner en valor. Así se explicó durante la mesa ‘Medicamentos biológicos y biosimilares, el futuro de la farmacia” que ha tenido lugar en el XIV Congreso de FEFE que se celebra en Gijón entre el 17 y 18 de mayo.

Para el catedrático de Farmacología de la Universidad de Alcalá, Francisco Zaragozá, los medicamentos biológicos “no son solo el futuro, son el presente”. Por eso, hay que revisarlos con el objetivo de “optimizar” su utilización para determinar las opciones más eficientes de su dispensación.

En este sentido, el director general de Sandoz, Joaquín Rodrigo, se definió como un defensor del modelo de farmacia mediterránea y, por tanto, destacó que “el papel de la farmacia asistencial es muy importante para la salud pública, la asistencia sanitaria, la promoción y preservación de la salud”. Por ese motivo, para Rodrigo, el debate debe dirigirse hacia el “abordaje integral de las patologías y el rol que debe jugar cada agente y, en este caso, la farmacia”.

En relación al papel de la farmacia, Rodrigo explicó que más que hablar de “biológicos si o no, hay que ir al tipo de medicamento y forma de administración”. De este modo, recordó que hay medicamentos de administración endovenosa que no tiene sentido valorar el papel de la farmacia en su dispensación, pero hay otros, como subcutáneos u orales, en los que sí.

Acerca de las diferencias entre medicamentos, el jefe de Servicio en el Departamento de Medicamentos de Uso Humano de la Agencia Española de Medicamentos, Antonio Blázquez, quiso dejar claras las diferencias regulatorias entre los medicamentos genéricos y los biosimilares. Del mismo modo, explicó que los medicamentos se distribuyen en calificaciones distintas que realiza la Aemps, como uso hospitalario, DH o receta. En este sentido, la jefa de Información Profesional y Publicidad de Medicamentos del Ministerio de Sanidad, Teresa Cuesta, explicó que en la actualidad, de nueve medicamentos biosimilares autorizados, “seis son exclusivos de hospital y tres se encuentran en oficina de farmacia”.

La visión directa de la farmacia fue ofrecida por la presidenta del Instituto de Formación Cofares (IFC), Yolanda Tellaeche, que vinculó el futuro de la farmacia a la dispensación de innovaciones. “No veo futuro a la farmacia sin los medicamentos biológicos y biosimilares. Y esto es porque la farmacia, tiene una herramienta de trabajo que es el medicamento”. Por ello, para Tellaeche si esa herramienta en un futuro, “no tendría sentido ni el profesional ni la propia farmacia”.

En relación al escenario futuro en el que la farmacia pueda dispensar medicamentos innovadores como los biológicos, los ponentes expusieron las necesidades que ven. Tellaeche puso de manifiesto la eficiencia que puede aportar la farmacia, “como ha hecho en estos últimos años” y reclamó la realización de propuestas para hacer viable la dispensación de innovaciones. Propuestas como “un pago por servicio, por margen, que la distribución tenga una actuación logística, etc.”

A este respecto, Zaragozá señaló entre los requerimientos básicos la formación. “Ante todo tiene que haber formación, primero del médico y también del farmacéutico”. Una formación que, sin duda es algo imprescindible para el trabajo a través de “protocolos integrados y el manejo conjunto de los pacientes” como reclamó el director general de Sandoz. Esta visión de trabajo en equipo fue bien recibida por la representante de Cofares, que vio en ello “el futuro” ya que “la visión de la sanidad como departamentos estancos como elementos de poder y estatus pasó a la historia”.