Ágora Sanitaria contó con el ponente Emilio García Jiménez, farmacéutico comunitario y vocal de Docencia e Investigación del Colegio de Farmacéuticos de Almería, para la exposición sobre cómo se debe actuar desde la oficina de farmacia ante el paciente hipertenso. La ponencia, celebrada en el marco de la pasada edición de Infarma, permitió a los asistentes interactuar a través del móvil, poniendo a prueba sus conocimientos.
García Jiménez incidió en la importancia del seguimiento farmacoterapéutico de la hipertensión desde la farmacia a través de una novedosa acción formativa, basada en el estudio de casos prácticos. Durante su exposición, resaltó que “el farmacéutico gracias a su accesibilidad y al seguimiento farmacoterapéutico contribuye identificando la necesidad, inefectividad y/o inseguridad relacionada con el tratamiento antihipertensivo”.
Según este experto, la metodología de casos clínicos de pacientes con hipertensión “permite practicar situaciones del día a día en la farmacia, donde el farmacéutico puede detectar problemas relacionados con medicamentos, resolverlos y actuar sobre la resolución de resultados negativos asociados a la medicación antihipertensiva, así como de otras patologías que pudiese manifestar o tener el paciente hipertenso”.
Durante la presentación del ponente se planteó un caso práctico entre paciente y farmacéutico en el que se dio a conocer los aspectos básicos de la hipertensión arterial y su relación con otras patologías crónicas de alta prevalencia, así como los factores que pueden influir en la efectividad de los tratamientos.
García Jiménez recalcó que “uno de cada tres pacientes no sabe que es hipertenso, uno de cada adultos sufre hipertensión y uno de cada tres, aun estando tratado para su hipertensión, no la tiene controlada”. En este sentido, el ponente subrayó la importancia de la prevención de la enfermedad cardiovascular, incidiendo en el abordaje del paciente hipertenso. “Al identificar y actuar sobre pacientes que presenten algún factor de riesgo vascular, calculando su riesgo cardiovascular, se puede intervenir en aquellos casos que sea necesario controlar alguno de estos factores para prevenir la enfermedad cardiovascular”, afirmó este experto.
Para García Jiménez “es necesario contar con programas de educación sanitaria, porque el autocontrol del paciente no es suficiente”. Además, insistió en que los pacientes normalmente se toman la tensión solamente por las mañanas y es importante conocer cómo está su tensión durante todo el día”. También aseguró que “la figura del farmacéutico va más allá de la simple dispensación de los tratamientos: es necesario ver al paciente de forma completa”.
Finalmente, resaltó que “existen factores de riesgo que no se pueden modificar y otros que sí se pueden controlar", haciendo referencia a que para ello existen servicios muy necesarios en las farmacias comunitarias, como son los de consejo nutricional, glucemias, hemoglobina glicosilada, tensión arterial, que van un paso más allá”.