La Consejería de Salud de Andalucía ha informado de la visita de su titular, Marina Álvarez, al Instituto Europeo de Investigación Traslacional de Celgene (Citre), ubicado en el Parque Tecnológico de La Cartuja de Sevilla, en el marco de la novena edición del Encuentro Internacional de Biotecnología BioSpain 2018, organizada por Asebio y la Junta de Andalucía en la capital hispalense.
La delegación de la Junta, encabezada por Álvarez y de la que también formaron parte el secretario general de Investigación, Desarrollo e Innovación en Salud de la Consejería de Salud, Rafael Solana; la directora general de Investigación y Gestión del Conocimiento, Teresa Molina; la directora gerente de la Fundación Progreso y Salud, Ana Madera, y la delegada territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, María Ángeles Fernández, fue recibida por la directora general de España y Portugal de la compañía, Katherine Stultz, el director de operaciones de Citre, David Villalba, el director general de Asebio, Ion Arocena.
Durante la visita, la consejera y el resto de autoridades pudieron conocer de primera mano el trabajo que se lleva a cabo en este centro, el único que tiene la compañía fuera de Estados Unidos con dedicación exclusiva a la I+D. En él se hacen investigaciones orientadas a la provisión de modelos de alta resolución de efectos compuestos por una variedad de tumores sólidos y hematológicos; a la identificación de biomarcadores relevantes y subpoblaciones de células, usando técnicas de biología computacional, y a la provisión de un biobanco de tumores y sistema de gestión automatizada de muestras, para almacenar los tejidos y extractos de colaboraciones de investigación y ensayos clínicos de Celgene. "Todo esto", indican desde la Consejería, "con el objetivo de reducir el tiempo de acceso de la población a las terapias que están desarrollándose y permitir que estos tratamientos personalizados puedan ser una realidad en un futuro cercano".
Protocolo de colaboración
Además, durante la visita, tanto la consejera de Salud como la máxima responsable de Celgene en España han puesto en valor el protocolo general de actuación que han suscrito este verano la Administración sanitaria y esta compañía para colaborar en la realización de actividades de formación, investigación clínica y desarrollo tecnológico, de cara a mejorar el tratamiento de algunas de las principales enfermedades que afectan a la ciudadanía andaluza. Un protocolo que, indican las autoridades andaluzas, tendrá una vigencia de tres años y se convierte en marco regulador para las futuras actuaciones que se lleven a cabo.
Lo que es seguro es que, a través de este acuerdo, van a colaborar en proyectos y programas de investigación e innovación de interés compartido en los centros, institutos, departamentos y otras unidades dependientes de la sanidad pública y de la empresa. También se apuesta por promover las convocatorias de ayudas para el desarrollo de proyectos de investigación e innovación y la mejora del capital humano en el campo de la biomedicina. Asimismo, contempla el asesoramiento recíproco e intercambio de información en actividades científicas, mediante la elaboración de informes o creación de grupos de trabajo, además de la cooperación en programas de formación.
El acuerdo también incluye la colaboración para la promoción social de la investigación, la colaboración de personal por tiempo limitado, y el establecimiento de unidades mixtas de investigación e innovación, así como el establecimiento de canales de comunicación entre ambas partes que faciliten la transferencia tecnológica y la innovación, el desarrollo de programas de formación e información y promoción de la salud a través de las nuevas tecnologías y otras actividades.
Para realizar el seguimiento del protocolo, se constituirá una comisión mixta de seguimiento integrada por dos representantes de cada una de las entidades.