La transformación digital es una de las cuestiones esenciales a las que debe enfrentarse la profesión farmacéutica siendo necesario implicar a la administración en este cambio con el objetivo de evitar duplicidades.
Herramientas puestas en marcha como Nodofarma Verificación, son un ejemplo de duplicidad, donde la administración va por un camino diferente al que la profesión ya ha marcado de forma previa. El mecanismo puesto en marcha por los farmacéuticos para cumplir con la obligación europea de identificar unitariamente los medicamentos y evitar los riesgos de falsificación ha visto en los últimos meses cómo le salía una competencia inesperada con la herramienta desarrollada por la administración: nodoSNSFarma.
Para el vicepresidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF) y presidente del Colegio de Farmacéuticos de Jaén, Juan Pedro Rísquez, Nodofarma Verificación funciona muy bien, por lo que no ve “lógico que la administración considere que debe realizarse nuevamente, es absurdo perder recursos”. Se refiere a NodoSNSFarma, la herramienta que el Ministerio de Sanidad, junto a las comunidades autónomas está desarrollando para sustituir a Nodofarma Verificación en las dispensaciones a través de recetas del SNS y, de este modo, obligar a las farmacias a utilizar múltiples nodos, además de incurrir en costes adicionales a los que el Reglamento Europeo de verificación unitaria de medicamentos ya exigió.
Ahora, el vicepresidente del CGCOF se ha mostrado esperanzado en la posibilidad de reanudar el diálogo con el Ministerio de Sanidad en esta materia y conseguir abordar nuevamente esta cuestión para “lograr llegar a una solución y pasar página”.
Esta y otras cuestiones de especial relevancia han sido abordadas durante la mesa titulada ‘Digitalización del Sistema Nacional de Salud: una responsabilidad de todos’, celebrada en el segundo día jornada en el 22 Congreso Nacional Farmacéutico que se está celebrando en Sevilla.
El moderador de la mesa y presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid, Manuel Martínez del Peral, también ha sido contundente durante la presentación del debate y ha destacado que la transformación digital es uno de los temas que más preocupación genera en el sector farmacéutico.
Peral ha destacado que, como consecuencia de la pandemia, en estos últimos años se ha generado un avance espectacular y la sociedad se ha adaptado a las nuevas tecnologías. De este modo, estamos inmersos en una transformación digital que, según Peral, “tendrá que ser universal, para todas las farmacias”, y realizarse de forma que “nadie quede atrás, no se puede avanzar a distintas velocidades”.
A este respecto, Rísquez destacó la importancia de este proceso de transformación digital e hizo especial énfasis al coincidir con Peral en el impacto que ha tenido la pandemia en esta cuestión a nivel global. Pese a esa generalización, el vicepresidente del CGCOF ha asegurado que “esta transformación se encuentra dentro del ADN de la profesión farmacéutica”, por lo que ha considerado la actualidad “un momento crucial para poder avanzar y que se pueda contar con un mismo lenguaje digital”.
Rísquez también señaló que este proceso de transformación debe ser liderado por el Consejo General, y quiso dejar claro que lo que no hagan los farmacéuticos “lo harán otros”. Por ello, consideró “necesario no cesar en el empeño y seguir avanzando” y hacerlo incluso “más rápido de lo que lo hacemos”. En este contexto, recordó la puesta en marcha de la agenda digital colegial, que cuenta con 28 proyectos.
En la sesión también intervino el presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Huelva, Jorge Juan García Maestre que también destacó la importancia de “ir más deprisa”. Según dijo, en consonancia con Peral, “debemos facilitar los recursos para todos los farmacéuticos, ya que nadie se puede quedar atrás”. Maestre también señaló que esta revolución es esencial para asegurar la salud del paciente ya que mejorará su salud y repercutirá en el sistema sanitario.
Por su parte, la presidenta del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Teruel, María José Villafranca, fue rotunda y señaló que “la digitalización es imprescindible para dar ese valor añadido a los farmacéuticos y mejorar la salud de los ciudadanos”. Villafranca añadió que “debemos basarnos en una digitalización de proximidad y esta vendrá a cambiar el modelo de relación farmacéutico-paciente”.
La interoperabilidad
Durante la mesa también se abordó la importancia de la interoperabilidad y las acciones que deben realizarse para mejorar a nivel autonómico. A este respecto, Rísquez insistió en la necesidad de utilizar el mismo lenguaje y, además, recalcó la necesidad de implicación de la administración y el resto de las profesiones. Según dijo, es necesario realizar una visualización más externa y realizar proyectos teniendo en cuenta al resto de los profesionales y de la mano de la administración, que, bajo su punto de vista “no nos tienen en suficiente consideración”. Estas afirmaciones fueron secundadas por Maestre que añadió que es necesario “convencer a la administración”, ya que la interoperabilidad no funciona y no se puede continuar con procedimientos tan tediosos, “sobre todo si se tiene en cuenta al paciente”, recalcó.
Villafranca, en sintonía con sus compañeros, señaló que la e-receta no ha conseguido la suficiente interoperabilidad, no se encuentra lo suficientemente desarrollada y depende de las comunidades autónomas. Según dijo, este aspecto es fundamental ya que el objetivo es conseguir, no solo suministrar las recetas a pacientes sino “darle una asistencia integral”. Por ello, insistió en señalar que para avanzar es necesario conseguir que los farmacéuticos puedan acceder a la historia clínica.
Otras de las cuestiones que fue defendida de forma unánime por los ponentes para avanzar en la digitalización es la mejora en la comunicación entre profesionales, así como, la la necesidad de que el farmacéutico pueda realizar intervenciones simples en la receta que evitarían la remisión del paciente al prescriptor y evitaría los problemas de adherencia de los pacientes.
En este sentido, Maestre insistió en que el profesional farmacéutico debe contar una mayor capacidad para decidir, como ejemplo, señaló que “no es normal que el farmacéutico no pueda cambiar una prescripción de comprimidos a sobres”, ya que el farmacéutico es un profesional cualificado y a la propia administración le interesa que esos problemas se solventen. El presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Huelva aseguró que se debe “ser más ambicioso”, además se debe buscar “entre todos la forma de incidir en este tipo de problemas”.
Transformación digital conjunta y para todas las farmacias
Los ponentes también abordaron la importancia de que todas las herramientas que facilitan la transformación digital se pongan a disposición de los todos y cada uno de los colegios profesionales para que a su vez sean facilitadas a todas las farmacias, “es importantísimo que estas lleguen a los colegios pequeños”, incidió Villafranca.
El presidente del COFM también incidió en la importancia de abordar esta transformación digital de forma conjunta. Para Rísquez la transformación digital individual “es un disparate”, no se trata de “hacer una web o una app”, es un “tema más serio y escalable” Por ello, y con este objetivo el CGCOF puso en marcha 28 proyectos para la transformación digital de la profesión, proyectos y agenda que tendrá que ser renovada, y ante todo, se coordinará con las 52 provincias, destacó Risquez.
Por último, los ponentes también coincidieron en la afirmación de que es necesaria la implicación de los consejos autonómicos y colegios oficiales de farmacéuticos para concienciar a todas las farmacias en la utilización de estas herramientas, así como en la correcta utilización de los datos que pueden generarse a través de la utilización de estas.