Aunque según las encuestas está alejado de las opciones de triunfo, el PSE-EE se configura en el inicio de la campaña como una de las formaciones que podrá otorgar la llave del próximo Gobierno Vasco, tras las elecciones de este próximo 12 de abril. Nacionalistas de uno y otro signo, PNV y EH Bildu, pueden ser los socios de la formación liderada por Eneko Andueza, si bien por el momento el líder socialista aspira a forzar las encuestas y vende su programa como una alternativa viable para el País Vasco.
En el plano sanitario el PSOE centra su programa en “devolver el prestigio” al Servicio Vasco de Salud y avanzar en la recuperación de los efectos de una pandemia que aún hace una importante mella en la sanidad vasca.
En el plano farmacéutico el PSOE se aliena dentro de las formaciones que ven en la farmacia comunitaria un “agente potenciador del sistema”. Así los socialistas incluyen en sus promesas electorales una serie de compromisos que llegan incluso a trascender el ámbito sanitario y se centran en lo social.
El programa socialista recoge su intención de "incorporar la red de farmacias como agente activo en la identificación de situaciones de vulnerabilidad, dentro de la estrategia sociosanitaria”. Junto a ello, también abogan por que las boticas sean “agentes de salud” que “pueden facilitar la adherencia a los tratamientos, tanto en el aspecto sanitario como en el aspecto económico, controlando los efectos adversos y colaborando en la transparencia de los servicios sanitarios.
En este contexto, el PSOE ve favorable a la implementación de los programas de Atención Farmacéutica Domiciliaria dirigidos a “garantizar la accesibilidad en zonas rurales y a colectivos vulnerables”. Igualmente plantean la “dispensación colaborativa (dispensación de proximidad) para acercar la medicación hospitalaria a las y los pacientes a través de sus farmacias de referencia, para evitar desplazamientos innecesarios de los pacientes a los hospitales”.
También trabajarán por “la adopción de actuaciones colaborativas entre farmacia comunitaria-Osakidetza respecto a tratamientos continuados prescritos, para garantizar la continuidad efectiva, así como facilitar el desarrollo de servicios asistenciales prestados desde las farmacias comunitarias en coordinación con el resto de estructuras sanitarias y sociales”.
Sanidad, piedra angular
Para todas las formaciones políticas vascas, la sanidad se ha convertido en una ‘piedra angular’ de esta precampaña. En el PSE-EE plantean la cuestión desde el punto de vista de la recuperación de la pandemia y la necesidad de “transformar Osakidetza” para que sea capaz de dar respuestas a las demandas que está plateando la ciudadanía.
La primera medida de los socialistas está encaminada a la contratación de personal. Nada menos que 2.000 plazas de sanitarias son las que se ha comprometido a contratar Eneko Andueza, si consigue ganar las elecciones. Junto a ello aboga por una reestructuración que garantice los tiempos de espera y culminar las OPE actualmente abierta.
Para Atención Primaria, los socialistas abogan por el modelo de Puntos de Atención Continuada, a través de una nueva Estrategia de Atención Primaria que pasa por la contratación de personal y el diálogo con la mesa sectorial.
El PSE-EE también plantea la creación de un plan autonómico de medicina personalizada, “que situé al País Vasco como referente” en este ámbito, así como la ampliación de cribados para la detección temprana de enfermedades raras. También se ampliará la Estrategia de investigación e innovación en Salud 2022-2025.
Los socialista, de llegar al poder, establecerán mecanismos efectivos de vigilancia, atención temprana y coordinación, en materia de salud mental. Para ello, explican será preciso aumentar el el número de profesionales, especialmente en el ámbito infanto-juvenil, la prevención del suicidoo, los trastornos de conducta alimenticia y los trastornos del espectro autista.
Nicolas Gonzalez Casares: