La Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP) ha presentado el Informe 2024, “Atención Primaria y Comunitaria en la continuidad asistencial de la atención a la cronicidad” y reclama la mejora de la gestión de la atención primaria, con recursos adaptados a las necesidades de salud de cada territorio, especialmente invirtiendo más en acercar la salud a las personas, la atención domiciliaria, el desarrollo de planes de cronicidad desplegados por todas las comunidades autónomas con indicadores comunes, la mejora de la continuidad asistencial y el aumento de la financiación. Estas han sido, entre otras, las conclusiones presentadas en el evento organizado por la POP.
Carina Escobar, presidenta de la plataforma, afirmó que el informe que se presenta este año se ha focalizado en la Atención Primaria y Comunitaria y la continuidad asistencial. Desde la POP se parte del convencimiento de que es fundamental poner al paciente en el centro y dar una respuesta “muchísimo más ordenada, organizada y centrada en las necesidades de las personas, especialmente en aquellos que padecen enfermedades crónicas”. La cronicidad es una realidad creciente, además de un desafío para los pacientes, sus familias y cuidadores, y por supuesto, para el sistema sanitario. Por ello, es un “reto enorme” convertir la Atención Primaria y Comunitaria en un nivel asistencial sólido que ofrezca una respuesta de calidad, coordinada y flexible, con el fin de atender a los pacientes a nivel local.
En el informe se ha intentado contar con el feedback de las comunidades autónomas para identificar las oportunidades de mejora, conocer lo que se está realizando y “escuchar atentamente lo que apuntan los gestores de ámbito autonómico”, destacó Escobar.
“La colaboración y participación activa de los pacientes es uno de los grandes logros que hemos conseguido a lo largo de estos años y 2025 se presenta lleno de oportunidades. Veremos cómo el rol del paciente cambiará respecto a su salud y al sistema sanitario”, aseveró la presidenta de la POP.
El evento ha contado con la participación de la consejera de Salud y Políticas Sociales del Gobierno de La Rioja, María Martín, quien ha destacado la importancia no solo de la existencia de estas instituciones, como la POP, sino de la gran labor que desarrollan. La elaboración de este informe, al igual que los anteriores, ha sido de gran valía para conocer las necesidades de los pacientes.
Martín destacó que el informe abarca no solo el ámbito de la salud, sino también el ámbito social. “Al final, los pacientes son personas y no solo se debe tener en cuenta la patología, sino todo aquello que las rodea”. De esta forma, se aborda la continuidad en la información, en la gestión clínica y en la relación del paciente con el sistema. Toda esta información, aseguró la consejera, posibilitará “avanzar mucho más deprisa y de forma más sólida hacia quienes nos debemos, que son los pacientes, y especialmente a los crónicos”. En este sentido, aseguró que “queda mucho por hacer y lo vamos a conseguir antes y mejor si seguimos avanzando de la mano y si nos seguís ayudando de esta manera”.
El acto también contó con la intervención de la ministra de Sanidad, Mónica García, a través de un vídeo, en el que expresó y reconoció el trabajo esencial que se está realizando desde la POP. En este sentido, apuntó que el observatorio es una herramienta fundamental para entender la realidad de los pacientes y, sobre todo, para impulsar los cambios necesarios para mejorar su calidad de vida.
En relación con las conclusiones y demandas recogidas en el informe, señaló que la Atención Primaria no es la puerta de entrada del sistema sanitario, sino “su corazón”. Por este motivo, mejorar su funcionamiento es una prioridad absoluta para el Ministerio de Sanidad. En este sentido, el Plan de Atención Primaria 2025-2027, que será presentado en breve, incluye medidas concretas para garantizar una atención más accesible, coordinada y resiliente. “Queremos que la atención primaria esté preparada para enfrentar los desafíos que supone la cronicidad”, afirmó.
A continuación de la presentación del informe que fue realizado por el director general de la Plataforma, Pedro Carrascal, se celebró un debate que contó con la participación de Mª Montserrat Chimeno, presidenta de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI); Esther Díaz, vocal de la Sociedad Española de Directivos de Atención Primaria (SEDAP) por la Comunidad de Madrid; Lourdes Martínez-Berganza, vicepresidenta de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen); José Antonio Quevedo, vicesecretario de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC); Juana Sánchez, responsable del Grupo de Trabajo de Dolor y secretaria general de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) Madrid, y Carina Escobar. El debate fue moderado por José María López Alemany, director de Diariofarma.
Desafíos para el abordaje de la continuidad asistencial
A instancia del moderador, los participantes abordaron los mayores desafíos para garantizar la continuidad asistencial. En este sentido, Montserrat Chimeno subrayó la necesidad de avanzar hacia una comunicación más fluida entre los distintos niveles asistenciales e incluso entre los profesionales del mismo nivel. Por su parte, Esther Díaz señaló que es fundamental una coordinación efectiva para lograr una atención integral y continua a los pacientes crónicos.
Carina Escobar indicó que el reto será conseguir una atención centrada en las personas, independientemente del nivel asistencial. Señaló que el sistema es poco flexible y cuenta con muchas barreras. Lourdes Martínez-Berganza añadió la necesidad de que la Atención Primaria resulte atractiva para los profesionales.
Juana Sánchez matizó que la Atención Primaria “no tiene que ser el corazón sino el cerebro, ya que, dadas sus características, podría dirigir más sabiamente”. José Antonio Quevedo aseveró que es clave garantizar la accesibilidad de los pacientes al sistema y conseguir una historia clínica integral e integrada, así como garantizar la longitudinalidad de la Atención Primaria.
Durante el debate también se abordaron los recursos existentes, la profesionalización, la coordinación entre niveles asistenciales y el enfoque comunitario y social.
En relación a los recursos y las medidas que se consideran prioritarias para cerrar la brecha existente y que se refleja en el informe presentado, ya que, la ratio de médicos y enfermeros en Atención Primaria y Comunitaria en España está por debajo del promedio europeo, los expertos coincidieron en la necesidad de atraer a los profesionales hacía esta especialidad, dotándola de los suficientes incentivos. Los ponentes de forma unánime apostaron por la necesidad de retener el talento y para ello, se destacó la necesidad de crear un entorno de trabajo agradable, contar con recursos y crear incentivos concretos sobre todo para las zonas de difícil cobertura, como las zonas rurales. Es fundamental disminuir la burocratización existente para que los médicos de familia puedan atender adecuadamente a los pacientes, aseveró Juana Sánchez.
Respecto a las barreras que limitan actualmente la coordinación efectiva entre Atención Primaria y Comunitaria y Atención Hospitalaria, se concluyó que, al día de hoy, todavía existen muchas barreras. En este sentido, Chimeno matizó que muchas de ellas han sido implantadas por los propios profesionales, “falta tiempo para trabajar en equipo”. Por otro lado, desde la administración se debe potenciar las políticas de coordinación, ya que existen inequidades a nivel autonómico.
Digitalización e interoperabilidad de la historia clínica digital
La importancia de la digitalización y la interoperabilidad de la historia clínica digital fue otro de los asuntos abordados. Los participantes destacaron que esta herramienta mejorará, sin lugar a dudas, la coordinación entre profesionales y facilitará una gestión integral y más centrada en el paciente. De forma unánime, se subrayó la necesidad de contar con una historia médica compartida, única a nivel nacional. “Sin continuidad en la información, difícilmente habrá continuidad asistencial. La historia clínica digital es una herramienta esencial que evitará errores”, afirmó Quevedo.
En este contexto, la presidenta de la POP, Carina Escobar, puso sobre la mesa la fractura existente a nivel autonómico. Mostró su preocupación porque en las comunidades donde se ha avanzado en digitalización será más fácil la implantación de las nuevas tecnologías.
Integración de servicios sociales con la Atención Primaria
Por último, se abordó la idoneidad de integrar los servicios sociales con la Atención Primaria y Comunitaria, destacándose que será clave para abordar las necesidades de los pacientes crónicos. La atención a la cronicidad requiere un enfoque multidisciplinar, y la coordinación entre servicios sociales y sanitarios permite ofrecer una atención más personalizada y efectiva, según destacó Esther Díaz.
En este contexto, se insistió en la necesidad de equilibrar la atención integral en zonas rurales o alejadas, donde los recursos son limitados. Para ello, se solicitó dedicar más recursos, potenciar el uso de las nuevas tecnologías e incentivar a los profesionales sanitarios. También se puso en valor la labor fundamental que desarrollan los farmacéuticos.
En relación con los profesionales, Lourdes Martínez-Berganza insistió en la necesidad de lograr un equilibrio que haga atractiva la labor profesional en zonas rurales.
‘Informe 2024. Observatorio de la Atención al Paciente. Atención Primaria y Comunitaria en la continuidad asistencial de la atención a la cronicidad’
El documento, que cuenta con el asesoramiento del Comité Asesor del Observatorio de Atención al Paciente (OAP), profundiza en la necesidad de recursos y en los retos presentes y futuros de la Atención Primaria y Comunitaria (APyC). Su objetivo es dar respuesta a la cronicidad, al envejecimiento poblacional y a una atención sanitaria y social que necesita ser más integrada.
La mayoría de las comunidades autónomas participantes en el estudio mostraron su compromiso con la promoción de la continuidad asistencial mediante el desarrollo de planes específicos con una dotación presupuestaria concreta para su implementación o, en su defecto, abordando esta cuestión en sus planes generales de salud y/o cronicidad.
Gestión de la cronicidad en Atención Primaria
En cuanto al abordaje de las personas con patologías crónicas, el informe advierte de una inequidad territorial entre las comunidades autónomas. Mientras algunas regiones han desarrollado entre 11 y 15 planes específicos, otras apenas implementaron entre uno y ocho. Las enfermedades reumatológicas, inmunomediadas, hepáticas y el asma tienen menor presencia en la planificación sanitaria respecto a otras patologías como el ictus, la cardiopatía isquémica, la diabetes, las enfermedades oncológicas, los trastornos mentales y las enfermedades neurodegenerativas, que sí se encuentran presentes en la mayoría de las estrategias autonómicas.
Esta situación podría obstaculizar la continuidad asistencial en regiones donde el proceso asistencial de ciertas patologías no está protocolizado, generando una mayor inequidad en el manejo de la enfermedad y en los resultados en salud de los pacientes.
Entre los nuevos planes en desarrollo, la obesidad destaca como una de las patologías más prioritarias, en consonancia con la creciente preocupación por su incremento y su reconocimiento como factor de riesgo para el desarrollo de diversas enfermedades crónicas, evidenciando la necesidad de adoptar medidas preventivas.
Tratamiento y cronicidad
De manera general, el informe revela que las comunidades autónomas cuentan con órganos multidisciplinares para abordar la cronicidad, una herramienta clave para mejorar la continuidad asistencial de los pacientes crónicos.
Por otro lado, el Comité Asesor del informe de la POP subrayó la importancia de realizar una revisión global de la interacción o duplicidad de los nuevos fármacos en pacientes polimedicados, especialmente en personas mayores o con fragilidad.
Gestión de los recursos humanos en Atención Primaria y Comunitaria
El informe identifica un déficit en los planes autonómicos que incluyen la continuidad asistencial. Sin embargo, los gobiernos regionales que aún no disponen de ellos han previsto su desarrollo en el futuro.
Se destacó la necesidad de mejorar las ratios de profesionales sanitarios y sociales en función del número de habitantes y las características de la población. Una adecuada planificación sanitaria y social permitirá mejorar la coordinación de los servicios y garantizar una atención integral que dé respuesta a las personas más frágiles, sus familias y cuidadores.
Promover y retener el talento
Es crucial reforzar los equipos de Atención Primaria, con el objetivo de enfrentar los retos del sistema sanitario. Reducir la rotación de profesionales resulta fundamental para ofrecer una atención de calidad, especialmente para los pacientes crónicos. En este contexto, el informe incide en la importancia de garantizar la estabilidad contractual, fomentar la formación continua y el desarrollo profesional, y crear entornos laborales atractivos con recursos adecuados.
El Comité Asesor también remarcó la necesidad de potenciar el papel de la enfermería en las visitas domiciliarias y en el seguimiento de la adherencia terapéutica, así como promover enfermeras de enlace y gestoras de caso. Del mismo modo, se destacó la participación de la farmacia comunitaria en el control de la adherencia terapéutica y la conciliación de la medicación.
El informe identifica, además, un margen de mejora en la actualización de la cartera de servicios de Atención Primaria, el refuerzo de la gobernanza, el impulso de la investigación y la participación efectiva de las asociaciones de pacientes.
Finalmente, el Comité Asesor destacó el actual déficit de financiación de la Atención Primaria y Comunitaria, así como la falta de orientación comunitaria en este nivel asistencial, evidenciada por el limitado grado de implantación y evaluación de la “Estrategia de Salud Comunitaria en Atención Primaria”.