El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado la incorporación de 22 asesores científicos a la Oficina Nacional de Asesoramiento Científico (ONAC), un órgano creado hace unos meses para fomentar el uso del conocimiento y la evidencia empírica en la toma de decisiones gubernamentales. Esta red de expertos, que trabajará en coordinación con los ministerios y centros de investigación, tiene como objetivo fortalecer el diseño de políticas públicas en sectores clave. Entre los seleccionados destaca Javier García Alegría, presidente de la Federación de Asociaciones Científico Médicas Españolas (Facme), quien aportará su experiencia en el ámbito sanitario.
La selección de los asesores fue resultado de un riguroso proceso en el que participaron más de 1.600 candidatos, evaluados por un panel integrado por representantes de instituciones como la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), la Confederación de Sociedades Científicas de España (Cosce), la red SOMMa y Facme. Este modelo de selección, pionero en España, garantiza transparencia y mérito, con el fin de incorporar a perfiles altamente cualificados y con experiencia en asesoramiento tanto a nivel nacional como internacional.
El grupo incluye a 12 mujeres y 10 hombres, con una media de edad de 47 años, y representa una amplia gama de disciplinas, como bioquímica, ingeniería, ciencias sociales, derecho y matemáticas. Además, refleja la diversidad territorial del país, con asesores procedentes de comunidades como Madrid, Andalucía, Cataluña y Galicia. Entre ellos se encuentran catedráticos, profesores titulares, investigadores de centros de excelencia y asesores científicos que han trabajado en organismos internacionales como la Comisión Europea.
Una red de colaboración entre ciencia y administración
La ONAC, dependiente de la Presidencia del Gobierno, será la encargada de coordinar esta red de asesores. Este organismo tiene como misión principal crear puentes entre el Ejecutivo y el ámbito académico, promoviendo la toma de decisiones basada en la evidencia. Sus funciones incluirán el desarrollo de herramientas, protocolos y códigos éticos que contribuyan a crear una cultura sólida de asesoramiento científico en las instituciones públicas.
Esta iniciativa marca un antes y un después en la gestión pública de España al priorizar el conocimiento técnico como eje fundamental en la toma de decisiones. Además de asesorar en retos específicos de cada ministerio, los científicos también participarán en la elaboración de políticas de largo plazo y en la respuesta a crisis complejas que requieran una sólida base científica.
Entre las herramientas que la ONAC pondrá en marcha se incluyen programas de estancias para investigadores en los ministerios, un sistema de becas de investigación aplicada y una unidad de apoyo con sede en el CSIC para conectar al Gobierno con los mejores talentos científicos.
España en la vanguardia del asesoramiento científico
Con esta medida, España sigue los pasos de países como Reino Unido, Estados Unidos y Canadá, que cuentan con sistemas similares de asesoramiento científico. Además, consolida su posición en el ámbito internacional como un referente en la integración del conocimiento académico en la gestión pública.
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Carmen Martínez, portavoz del Grupo Socialista en la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados: 
Margarita de la Pisa, eurodiputada de Vox.: 
Ion Arocena, director general de la Asociación Española de Bioempresas (Asebio): 
Javier Padilla, secretario de Estado de Sanidad: