Las previsiones que maneja el Gobierno sobre inversión en Sanidad hasta 2018 no son nada halagüeñas. Según se recoge en el Plan de Estabilidad 2015-2018 que el Ejecutivo remitió a la Comisión Europea, en 2018 la inversión en sanidad con respecto al Producto Interior Bruto (PIB) alcanzará un 5,3% frente al 5,9% actual. Esa situación “podría poner en riesgo la calidad del sistema sanitario”, según el subdirector general de Farmaindustria, Javier Urzay.
Supuesto de evolución del PIB hasta el 5,3%
Supuesto de evolución del PIB mantenida en el 5,9%
Por ello, la patronal de la industria farmacéutica innovadora considera que lo óptimo sería, al menos, mantener la inversión sanitaria actual con respecto al PIB, lo que supondría en términos nominales, incrementos del 4% de los gastos sanitarios. Si por el contrario se ejecuta el Plan establecido por el Gobierno, el crecimiento, sería de solo un 1,4% anual en estos cuatro años.
Si se mantiene la previsión del Gobierno, será muy difícil recuperar el terreno perdido en los años de la crisis ya que, según datos de Eurostat, el gasto sanitario de nuestro país habría caído entre 2009 y 2013 un 11%. Cifra solo superada por los casos de Grecia y Portugal y muy alejado de la media de la Unión Europea-28 que se situó en un 8% o la Eurozona, en la que creció un 5%.