La segunda edición del encuentro SaludOnMe, promovido por Novartis, ha propiciado el encuentro de un nutrido grupo de expertos, que han debatido sobre el presente y el futuro de la innovación en salud, concluyendo que las nuevas tecnologías y los entornos digitales son y van a ser piezas clave del empoderamiento del paciente en lo que tiene que ver con las decisiones sobre su salud y su bienestar. No obstante, dada la explosión de información sobre salud en las redes, llamaron a la mediación de profesionales sanitarios.
A este respecto, defendieron la recomendación, por parte de estos profesionales, de fuentes cualificadas de consulta en internet y los nuevos entornos digitales. Sobre este particular, Fernando Fabiani, médico de familia y autor del libro ‘Vengo sin cita’, puso de relieve el avance del fenómeno de la ‘Cibercondria’, que consiste en asumir infundadamente enfermedades por síntomas comunes, basándose en la revisión de los resultados de búsqueda en la red, y destacó que, para evitarlo el profesional de la salud tiene que ayudar a sus pacientes a localizar y consultar web de referencia que contengan información rigurosa y proveniente de fuentes cualificadas.
En esta misma línea se expresó Vanessa Pérez, psicóloga y autora del blog ‘Y de verdad tienes tres’. Su hijo mayor sufre una enfermedad rara y lamentó que, tras el diagnóstico, tuvieron que hacer frente a una importante falta de orientación en los temas relacionados con el día a día de la enfermedad. Por eso, Pérez abogó por un mayor acompañamiento por parte del sistema de salud y destacó la importancia de las que llama ‘Familias 2.0’, espacios web o blogs creados tanto por pacientes y su entorno o asociaciones, en los que se comparten experiencias y conocimientos que puedan ayudar en el día a día del proceso que conlleva la patología.
El móvil como fuente de datos
Durante el encuentro también se abordó el potencial del móvil para medir, entender e interpretar las señales en el comportamiento de las personas, así como el uso del Big Data para el bienestar social. En este sentido, fue Nuria Oliver, ingeniera en telecomunicaciones y doctora por el Media Lab del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), la encargada de profundizar en la irrupción de la inteligencia artificial. Oliver concluyó que avanzamos hacia una transformación del móvil tal y como lo conocemos hoy en día, gracias a innovaciones como la realidad aumentada y la realidad virtual, los displays retinales y los wearables.
También se analizaron los avances en el tratamiento personalizado a través de las herramientas de edición genética CRISPRS. En este caso, fue Lluis Montoliu, investigador científico del CSIC en el Centro Nacional de Biotecnología, investigador y miembro del Comité de Dirección del Centro de Investigación Biomédica en Red en Enfermedades Raras (CIBER-ER, ISCIII), quien hizo referencia a las herramientas permiten cortar el ADN de forma precisa, aunque el gran reto que se plantea ahora es en la precisión de los mecanismos de reparación. "Cada una de las moléculas que se deben reparar lo hacen de forma distinta. Actualmente esto lo sabemos gestionar en el laboratorio, pero todavía no sabemos controlar y maximizar que la mayoría de esas modificaciones ocurran en una dirección y no en otra", señaló.
Culminó la ronda de intervenciones José del R. Millán, profesor de Defitech en el Instituto Federal Suizo de Tecnología de Lausana, quien aludió a los avances en el ámbito de las interfaces cerebrales con el objetivo de contribuir a la rehabilitación de personas con discapacidad motora que afecta a su movilidad y su capacidad de comunicación e interacción con el entorno. Concretamente, se refirió a la permite a las personas mover un cursor solo imaginando su movimiento, para seleccionar las letras para poder interactuar con otras personas, mientras que en el caso de la movilidad se ha trabajado en el control de las sillas de ruedas enviando comandos mentales.