El Gobierno ha hecho público el Plan España Digital 2025, con el que pretende llevar un paso más allá el proceso de digitalización que se ha dado en España en los últimos años, a través de programas como el Plan Info XXI, el Programa España.es, el Plan Avanza o la Agenda Digital para España, y aprovechar el impulso que viene desde Europa, en forma de nuevos fondos (un ejemplo es el Fondo de Recuperación y Resiliencia, por el que España podría llegar a percibir hasta 140.000 entre transferencias y préstamos), para impulsar definitivamente la transformación digital del país y utilizarla como palanca para relanzar el crecimiento económico, la reducción de la desigualdad, el aumento de la productividad, y el aprovechamiento de todas las oportunidades que brindan estas nuevas tecnologías. Todo ello, reza el documento, "con respeto a los valores constitucionales y europeos, y la protección de los derechos individuales y colectivos".
Dentro de los "proyectos tractores" de la transformación digital, el Plan recoge la intención de trabajar con los departamentos ministeriales, y con los distintos niveles de las administraciones públicas, en la exploración gradual, lanzamiento e impulso de otras oportunidades estratégicas de digitalización de los servicios públicos. Y una de las apuestas explícitas es la del impulso de la transformación digital del sector salud, a través, dicen, "de la innovación, la investigación, el fortalecimiento del Sistema Nacional de Salud (SNS) y el empoderamiento de las personas".
Para el Gobierno, este impulso debe guiar a la sanidad "hacia la predicción, personalización y eficiencia". Consideran que "se incrementará la eficiencia, eficacia y calidad de la sanidad agilizando los sistemas de información y fomentando la compartición e interoperabilidad de los datos de forma segura, así como contribuir a la personalización de los servicios prestados".
De hecho, se desglosan algunas medidas más concretas para avanzar en ese proceso, especificando tres áreas concretas de actuación: la investigación para medir y mejorar los resultados en salud y diseñar sistemas preventivos; la asistencia a pacientes para automatizar y proveer de herramientas a la ciudadanía para que dispongan de un mayor conocimiento para la toma de decisiones; y el empoderamiento del paciente con herramientas de telemedicina, autodiagnóstico o mejora de la accesibilidad.
Entre las acciones contempladas se incluye también, prosigue el Plan, "la agilización de los sistemas de información, de forma que permita una mejor compartición de datos e interoperabilidad para la prestación de servicios, el diseño de estrategias de políticas de salud, así como favorecer una atención personalizada a las necesidades de la ciudadanía".
Esperan que todo ello contribuya a desarrollar un Sistema Nacional de Salud "coordinado, interoperable, integrado, multidimensional, y que desarrolle aplicaciones para todo el ecosistema biosanitario: la Salud Pública y la Epidemiología, la práctica clínica, la gestión sanitaria, las Universidades, los centros de investigación y un pujante sector de empresas emergentes e innovadoras alrededor de la salud y los estilos de vida, con claras sinergias entre todos".
Hay también implicaciones para la salud en el apartado dedicado al Big Data y la inteligencia artificial. Consideran que este campo es uno de los que más se pueden beneficiar del desarrollo de estas funcionalidades y recuerdan que la Unión Europea está dando pasos para materializarlo, como son la elaboración de una Estrategia y un Plan Coordinado de IA en 2018 y la publicación de un White paper para avanzar en la construcción de un ecosistema europeo de IA, el pasado mes de febrero.
En línea con el Dictamen para la reconstrucción
Cabe destacar, sobre esta apuesta del Gobierno por la transformación digital del sistema de salud, que éste es uno de los ejes contemplados en el Dictamen de la Comisión de Reconstrucción Económica y Social, en el apartado sanitario. De hecho, ha sido uno de los aspectos que más consenso ha generado, y que fue muy reivindicado por los expertos que comparecieron en la Comisión.
Entre las propuestas incluidas en el documento está el desarrollo de una Estrategia Nacional de Transformación Digital del SNS, en coordinación con las comunidades autónomas y escuchando a todos los actores, con actuaciones definidas a partir de un análisis de la situación y de los ámbitos a mejorar, y con una unidad directiva de alto nivel que se encargue de su gestión.
Además, se aboga en el documento por "realizar el seguimiento de las tecnologías de la información y la comunicación aplicadas al entorno sanitario, tanto en España como en otros países, para incorporar las innovaciones e impulsar y evaluar experiencias piloto", así como "el inventario y evaluación periódica de los activos y capacidades en TIC del SNS "para difundir experiencias exitosas de los servicios autonómicos de salud y de sus centros sanitarios".