Brecha digital, homogeneizar la digitalización de la historia clínica o implementar un programa de transformación digital válido para todo el sistema sanitario son algunos de los retos que han sido abordados por los expertos del XV Foro de Sanidad, organizado por el Centro de Estudios de Políticas Públicas y Gobierno de la Universidad de Alcalá (CEPPyG) y en colaboración con la compañía farmacéutica alemana Boehringer Ingelheim, que se ha celebrado este lunes en las Cortes de Castilla y León.
Julio Sánchez Fierro, uno de los ponentes de la reunión, considera prioritario “definir un horizonte estable y pactado de transformación digital de nuestra Sanidad a nivel político, institucional, profesional y empresarial que cuente con todos los operadores sanitarios”.
Los potenciales beneficios de la transformación digital sobre la sostenibilidad del SNS han sido otra de las cuestiones que han marcado la jornada. En palabras de Carmen Mateo, directora del CEPPyG, es la primera vez que el Centro aborda esta necesidad estratégica de una manera integral. “Pese a que cualquier cambio implica dificultades, debemos mantener un rumbo fijo. Es importante acoger las nuevas herramientas y modelos de trabajo que impliquen una mejora en la atención sanitaria que reciben los pacientes. Desde el Centro de Estudios siempre se apostará por este tipo de iniciativas que permiten acercar las últimas tendencias a la sociedad civil”, ha destacado la directora.
Por su parte, Enrique Castellón, director del XV Foro de Sanidad, ha afirmado que el sistema sanitario “tiene que ganar en eficiencia si quiere ser sostenible y ofrecer el servicio de calidad que los ciudadanos esperan, por lo que su transformación digital es imprescindible”.
El foro ha abordado de una forma holística la necesidad de impulsar la digitalización de la sanidad más allá de situaciones específicas como la pandemia, que obligó a acelerar la implementación de estos procesos.
Así, los expertos han destacado que la transformación digital del SNS reducirá la presión asistencial presencial mediante la automatización de procesos o los seguimientos en remoto. En especial, las herramientas digitales pueden tener un impacto notable en el ámbito rural, un medio envejecido en el que podrán reforzar la labor de Atención Primaria.
Sin embargo, “es necesario impulsar la integración compartida de los datos para explotarlos y tomar mejores decisiones. Es difícil acertar cuando se tiene la información fraccionada. Por ejemplo, a la hora de establecer estrategias frente a la cronicidad o patologías crónicas como la diabetes”, ha explicado Andoni Lorenzo, presidente del Foro Español de Pacientes.
Además de la integración de estos cambios en el SNS, la gobernanza de los datos sanitarios también entraña un riesgo para el sistema. “Hay que encontrar un equilibrio entre la circulación de la información y la necesidad de incorporar garantías de confidencialidad y privacidad para los pacientes”, ha destacado José Manuel Baltar, consultor y exconsejero de Sanidad del Gobierno de Canarias.
En la misma línea, José Luis Zamorano, catedrático de Cardiología en la Universidad de Alcalá, ha detallado que “en los próximos años se incorporarán cambios profundos en forma de mecanismos digitales y médico-legales que avanzarán en la seguridad del paciente, un concepto que va más allá de la intervención o el tratamiento”.
Para Concha Marzo, directora de Government Affairs de Boehringer Ingelheim España, la digitalización y el tratamiento correcto de los datos puede suponer una mejora en el acceso a la innovación. “Desde Boehringer Ingelheim España queremos abordar los retos presentes y futuros de nuestro SNS, como un agente comprometido y socialmente responsable”, ha concluido.
Nicolas Gonzalez Casares: