Un total de seis compañías españolas, una incluida entre los 14 proyectos y cinco entre las empresas asociadas participarán en ‘Med4Cure’, el cuarto proyecto importante de interés común europeo y el primero en el sector sanitario (IPCEI), al que el pasado martes la Comisión Europea dio el pistoletazo de salida con una financiación pública de 1.000 millones de euros.
La iniciativa tiene como objetivo acelerar los avances médicos y fomentar la resiliencia de la industria sanitaria de la UE en cuatro áreas: Desarrollo de nuevos fármacos; Desarrollo de mejores modelos para identificar y probar terapias; creación de nuevas sustancias farmacológicas y vacunas innovadoras y finalmente la creación procesos productivos innovadores hacia la sostenibilidad en la cadena de valor de la salud.
Sylentis, una compañía radicada en Madrid y perteneciente al grupoPharmar, es la única representación española entre los 14 proyectos de interés. La compañía española trabajará en los tres últimos grupos de la iniciativa. Junto a los proyectos, que realizan laboratorios de seis Estados miembros: Bélgica, Francia, Hungría, Italia, Eslovaquia y España. ‘Med4Cure’ incluye la colaboración de otras once compañías que actuarán como socios colaboradores. En este caso la participación empresarial española es mucho más amplia: de los once laboratorios colaboradores, cinco son españoles: Reig Jofre, Rovi, Medichem, Minoryx Therapeutics y Oryzon Genomics.
Aunque los objetivos concretos serán desvelados por la Comisión Europea, dos compañías españolas han informado sobre los planteamientos generales de su participación en este proyecto. En el caso de Reig Jofre la compañía participa en calidad de miembro asociado en el proyecto EMINTECH del consorcio Med4Cure, y planea aportar su experiencia y conocimiento en el desarrollo de tecnologías farmacéuticas avanzadas a las nuevas terapias personalizadas y en infecciones no resueltas. Por su parte, Oryzon Genomics participará en el proyecto VANDAM y tiene como objetivo validar fármacos experimentales epigenéticos aplicando un enfoque de medicina personalizada para enfermedades raras y huérfanas.
El objetivo del proyecto, según ha indicado la Comisión Europea “contribuirá notablemente a los objetivos de la Unión Europea de la Salud aportando innovaciones que aborden enfermedades para las que no existen medios satisfactorios de prevención o tratamiento y aumentando la preparación de la UE ante amenazas emergentes para la salud”.
El origen del IPCEI se retrotrae a marzo de 2022 cuando 16 Estados miembros firmaron un Manifiesto conjunto para lograr la primera iniciativa de este tipo en el ámbito de la salud en el ámbito de la innovación en las tecnologías de producción de medicamentos, la lucha contra la resistencia a los antimicrobianos, las enfermedades raras y las amenazas emergentes para la salud y el desarrollo de terapias celulares y genéticas.
Junto a la financiación pública de hasta 1.000 millones de euros en financiación pública, la Comisión espera que “se desbloqueen 5.900 millones de euros adicionales en inversiones privadas”.
La finalización del IPCEI general está prevista para 2036, con plazos que varían en función de los proyectos individuales y las empresas involucradas. Según los Estados miembros participantes, se espera que se creen alrededor de 6.000 puestos de trabajo directos e indirectos.