Una tesis de la Facultad de Farmacia de la Universidad del País Vasco (UPV) ha analizado cómo influyen diversos factores en el gasto farmacéutico de los médicos de los centros de salud de Atención Primaria y ha evaluado su relación con los indicadores de calidad de prescripción.
El farmacéutico de Atención Primaria en la Dirección de Integración Asistencial de la Organización Sanitaria Integrada de Araba de Osakidetza, Javier Martínez, ha cuantificado la prescripción de los médicos que trabajaban en la Comarca Araba de Osakidetza en su tesis doctoral ‘Factores relacionados con el gasto farmacéutico y la calidad de la prescripción en un área de atención primaria’. Para ello, realizó un análisis descriptivo de tipo cuantitativo del gasto farmacéutico, estudió los perfiles de prescripción (a nivel de subgrupos terapéuticos y principios activos) y evaluó la relación entre el gasto farmacéutico y el Índice de Calidad de la Prescripción (ICP).
En la tesis, también se han analizado las características del personal facultativo y los indicadores de calidad de prescripción y, por último, realizó una valoración de los factores que influyen en la prescripción farmacéutica de los médicos de familia.
Tras el análisis de los datos, Martínez destacó que no se han observado diferencias en el gasto farmacéutico por persona en función del sexo y la edad del personal facultativo. El trabajo no ha encontrado diferencias según la estabilidad laboral ni en función del ámbito de trabajo rural o urbano. En lo que sí ha encontrado diferencias de la calidad de prescripción es en función de si los prescriptores analizados trabajan en centros de salud con docencia a médicos residentes o no.
Los tutores prescriben menos y se ajustan a guías
“Respecto a la tutoría docente, el personal facultativo acreditado para impartir docencia receta menos envases, con menor precio medio por envase y con mayor seguimiento de las directrices de Uso Racional del Medicamento”. detalla Martínez.
Por otro lado, señala que “los médicos docentes realizan una mayor prescripción de antibióticos considerados de uso prioritario en atención primaria, menor uso de medicamentos novedosos que no aportan mejoras terapéuticas, prescriben más principios activos seleccionados en la Guía Farmacoterapéutica de Atención Primaria, y tienen una mayor prescripción de los bisfosfonatos recomendados como de primera elección en el tratamiento de la osteoporosis”, asegura la tesis.
Otro resultado destacable del trabajo, hace referencia a los factores que más influyen en el gasto farmacéutico, como son el elevado porcentaje de pensionistas en el cupo médico, el uso de medicamentos novedosos y la prescripción de estatinas y de antiulcerosos inhibidores de la bomba de protones (IBP). “Si nos fijamos en los pacientes en general, la antigüedad en la plaza médica, la estabilidad laboral y un mayor ICP influyen en el menor gasto farmacéutico por persona; en el caso de los pensionistas, también interviene el número de pensionistas asignados por facultativo”. Curiosamente, detalla Martínez, “los médicos con un mayor porcentaje de pensionistas en su cupo tienden a gastar menos por pensionista”.
De la investigación se puede extraer también que los médicos que llevan más tiempo trabajando, tienen peores indicadores de calidad y prescriben menos medicamentos recomendados en atención primaria. “Esta circunstancia se debe a que prescriben menos antibióticos beta-lactámicos, recetan menos analgésicos-antiinflamatorios no esteroideos (AINE) de uso preferente en atención primaria (ibuprofeno y naproxeno), usan más antiulcerosos IBP y obtienen peor índice de calidad de prescripción, lo que sugiere que implementan peor las recomendaciones de selección de medicamentos en relación a seguridad y eficiencia establecidas por Osakidetza y el Departamento de Salud”, explica.
Más antiulcerosos, igual a menor calidad
Por último, el estudio establece que los factores que más influyen para que los médicos sean considerados como hiperprescriptores son: prescribir más medicamentos antiulcerosos, tener baja calidad de prescripción, un elevado porcentaje de pensionistas en el cupo y más de 50 años de edad.
Para la investigación, los datos se han obtenido a partir de las recetas prescritas por los 200 médicos de familia de la Comarca Araba y dispensadas por las oficinas de farmacia entre los años 2009 y 2014. Las variables evaluadas corresponden a los indicadores de calidad de la prescripción farmacéutica recogidos en el Contrato-Programa del Departamento de Salud del Gobierno Vasco: prescripción de medicamentos genéricos, medicamentos novedosos, antibióticos, analgésicos, antihipertensivos, hipolipemiantes, antidepresivos, antiulcerosos, medicamentos para osteoporosis y medicamentos de la Guía Farmacoterapéutica de Osakidetza y su relación con los factores profesionales: edad, sexo, docencia, ámbito rural o urbano, estabilidad laboral y antigüedad en la plaza médica.