A falta de unos días para el comienzo oficial de la campaña electoral para las elecciones gallegas del próximo 18 de febrero, Partido Popular y Bloque Nacionalista Gallego, las dos primeras formaciones de la comunidad autónoma, han aprovechado este fin de semana para plantear las principales líneas de sus respectivos programas políticos, con una amplia representación de propuestas en el plano sanitario.
En el caso de la formación popular, su candidato y actual presidente del Gobierno, Alfonso Rueda, ha señalado entre otras cuestiones su “compromiso” con el desarrollo de la colaboración con la farmacia comunitaria y la creación de las farmacias centinela, el desarrollo de nuevos fármacos innovadores y el apoyo a la farmacia rural a través de un programa específico.
Entre las 870 medidas de su programa electoral, los populares quieren llevar a cabo, dentro del plano sanitario, el desarrollo de un nuevo modelo de distribución en farmacia hospitalaria y el desarrollo del cribado genético. Igualmente crearán un sistema de información sobre ensayos clínicos y se comprometen a desarrollar la categoría profesional de personal asistencial-investigador ya esbozada en la actual legislatura.
Otras medidas incluidas serán la incorporación de nuevas vacunas al calendario autonómico y la creación de una nueva ley de Salud Pública y un nuevo Plan de Salud Mental, que ya ha sido iniciado por el actual Ejecutivo Gallego y una nueva estrategia de cuidados paliativos.
Igualmente el PP se compromete a reforzar los recursos humanos del Sergas, especialmente en el área de la atención mental, incluyendo más personal en los centros de salud y un plan especial para las listas de espera.
Nueva Ley de Garantías
Por su parte, la segunda formación política de la comunidad, el Bloque Nacionalista Gallego (BNG) plantea un escenario radicalmente diferente al de sus competidores populares. Desde la formación nacionalista se aboga en su programa electoral por el refuerzo del Segas, como una de las principales señas de la campaña.
Entre las medidas que plantean destaca una destinada a evitar la derivación “masiva” a la sanidad privada a través de la creación de una nueva Ley de Garantías de Prestaciones Sanitarias, centrada en reforzar la gestión pública de la salud.
Además se inclinan por el desarrollo de un plan de Salud Mental y un sistema de atención integral de la salud de la mujer. Dentro de estas medidas se creará también un plan de atención a la fibromialgia.
Desde el BNG también se hace especial referencia a la atención de las enfermedades raras y la creación de un sistema de alertas y emergencias sanitarias, que supondrán la base de un sistema integrado para dar una respuesta rápida a crisis de salud pública.
Nicolas Gonzalez Casares: