El Consejo de Gobierno de La Rioja ha acordado suscribir, a través de la Consejería de Salud y Políticas Sociales, el convenio con la Fundación Rioja Salud para la elaboración del proyecto de innovación y mejora del proceso de atención al ciudadano en salud mental y emocional, que se desplegará entre este año y 2025. El proyecto se desarrollará entre este año y 2025 y contará con un presupuesto de más de un millón y medio de euros con la colaboración de la Fundación La Caixa.
Así ha informado de ello la consejera de Salud y Políticas Sociales, María Martín, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, quien ha recordado que la Organización Mundial de la Salud (OMS) define la salud como un estado completo de bienestar físico, mental y social, y no solo la ausencia de enfermedad o dolencia.
María Martín ha destacado que el objetivo final del plan ‘Saludablemente’, en el que la Fundación La Caixa colaborará tanto con aportación económica como con personal especializado para mejorar la salud mental y emocional de los riojanos, siguiendo las líneas marcadas por el IV Plan Estratégico de Salud Mental de la Rioja. Para ello se establecerán unos niveles de intervención psicológica en Atención Primaria -eje vertebrador de la asistencia sanitaria que reciben los ciudadanos riojanos-, dirigidos tanto a la población adulta como a la infantil y la juvenil, con especial atención al ámbito rural y a los colectivos más vulnerables.
Este propósito se concretará en la contratación de diez psicólogos que desarrollarán su labor en centros de salud de Logroño, Calahorra y Haro. Estos profesionales darán soporte a las actuaciones de prevención e intervención psicológica.
Se busca implementar (de forma piloto) y analizar la efectividad de un programa de prevención de tipo transdiagnóstico (enseñar habilidades de regulación emocional, conciencia emocional, de afrontamiento-exposición, flexibilidad cognitiva y psicoeducación) en formato grupal.
Se espera que la implementación de programas preventivos suponga una mejora en los síntomas emocionales (ansiedad y depresión), mejore la calidad de vida y bienestar psicológico y proporcione herramientas para una mejor gestión emocional en la vida cotidiana.
La aspiración de este proyecto es avanzar en el bienestar emocional y la salud mental de los riojanos para lo que se acometerá una redefinición y mejora de la respuesta del sistema público a las necesidades en salud mental en salud mental en la Rioja, lo que abarca desde los protocolos de actuación a las actuaciones de seguimiento, tanto de las personas en particular, como de toda la sociedad en su conjunto.
De forma paralela, además de los diez especialistas en Atención Primaria, el Plan ‘Saludablemente’ también financia la contratación de cinco psicólogos que estarán centrados en déficits de neurodesarrollo infanto-juvenil, como el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) entre otras, que influyen en el rendimiento y fracaso escolar de los alumnos.
Asimismo, se contará con un técnico administrativo con capacidad de análisis, porque no se trata solo de un dispositivo asistencial, sino de uno de investigación, que permitirá evaluar personalmente a cada usuario y, en función de los resultados, avanzar en su atención personalizada.
En la actualidad, diferentes países como Reino Unido y Noruega, han implementado programas similares como, por ejemplo: ‘Mejorando el acceso a terapias psicológicas’ (Improving access to psychological therapies) que han demostrado que el 50% de los que asisten han mejorado y que el 75% han notado una franca mejoría. Además, estiman que un 80% del total de consultas de salud mental en atención primaria son por sintomatología ansioso-depresiva. Por su parte, las guías del National Institute for Health and Clinical Excellence (NICE), indican que la intervención psicológica es el tratamiento de primera elección para los cuadros depresivos leves y moderados, así como para muchos trastornos de ansiedad. Esto podría traducirse en un descenso en el uso de ansiolíticos como medicación de rescate y, posiblemente, permitiría reducir la alta presión asistencial en las Unidades de Salud Mental del SNS.