El ministro de Sanidad, Salvador Illa, compareció ante el Grupo de Trabajo de Sanidad y Salud Pública de la Comisión de Reconstrucción Económica y Social el pasado 18 de junio para ofrecer su versión sobre la orientación que debería darse al sistema sanitario y para responder a las preguntas de los grupos parlamentarios al respecto. En éstas se vio que la preocupación por posibles rebrotes es patente, como lo es la adquisición de una vacuna para poder imaginar un futuro sin miedo al coronavirus.
Fueron varios los parlamentarios que le preguntaron al ministro por esta cuestión. Entre ellos, Mireia Vehí, del Grupo Mixto por la CUP, Juan Luis Steegmann, de VOX, Ana Pastor, del Grupo Popular, y Esteban Bravo, del Grupo Vasco. Illa aseguró que el Ejecutivo, en general, y su Departamento, en particular, defienden "el enfoque europeo, porque nos da potencia de compra, y garantiza el acceso en equidad". El ministró se adhirió a las tesis de los que plantean que "habrá varias, no una" (vacuna) y opinó que "lo primero es ver los datos, la evidencia". A partir de ahí, como se decía, la idea es "trabajar con socios europeos" para garantizar un acceso "en equidad" tan pronto como estén disponibles. Hoy mismo, 19 de junio, el ministro ha comunicado la adhesión a un acuerdo entre la Comisión Europea y los estados miembros para que sea la propia Comisión la que adquiera las vacunas para toda la Unión.
Al respecto de las vacunas, Steegmann hizo referencia a varios proyectos de investigación que están teniendo lugar en centros españoles y reclamó al ministro que se incentiven estas vías. Illa le aseguró que se está dando apoyo a estos proyectos y que ya ha habido "contactos de la Aemps con empresas que pudieran producir" estas vacunas, por si las investigaciones concluyeran con éxito.
Como se decía, otra de las preocupaciones expresadas mayoritariamente por los diputados de los diferentes grupos tuvo que ver con la preparación del sistema sanitario para posibles rebrotes, dado que las noticias procedentes de otros países hacen pensar que España no se va a librar.
A este respecto, el titular de Sanidad aseveró que "toda precaución es poca". No obstante, ofreció también una visión optimista con respecto a la respuesta que podría ofrecer el país y, particularmente, el sistema sanitario, justificando su posición con la respuesta a pequeños rebrotes que se están dando. "La población está más concienciada, estamos todos más prevenidos. Y ahora, además, conseguimos hacer PCR en uno o dos días. Ha habido ya algún brote y se ha actuado con contundencia. También hemos avanzado en el manejo del paciente", señaló Illa.
El portavoz de VOX consideró que es imprescindible "multiplicar la realización de pruebas diagnósticas" y el ministro confirmó, a este respecto, que la revisión de los protocolos es "constante", aunque siempre "en función de la evidencia". En relación con las PCR, afirmó que se está cerca de "acordar con las CCAA hacerlas a todos los contactos estrechos". En cuanto a la posibilidad de aplicar test a los turistas que están comenzando a llegar a España, por lo que le preguntó Ana Oramas, de Coalición Canaria por el Grupo Mixto, se estaría trabajando en un protocolo que incluiría "a sintomáticos y contactos estrechos".
En caso de que las cosas se pongan muy mal, existe la posibilidad de tener que reaplicar el estado de alarma, un extremo que rechazó Concep Cañadell, de Junts per Catalunya por el Grupo Plural, que pidió al ministro que renuncie a opciones de centralización de competencias. Illa aseguró no tener interés en la aplicación de dicha medida, pero quiso ser franco: "No dude de que si hace falta, por una cuestión de Salud Pública, lo haremos. Es incuestionable que ha funcionado, que el confinamiento ha permitido detener la transmisión de los contagios".
Objetivos y líneas de trabajo
Estas aproximaciones para hacer frente a nuevas oleadas, e incluso a otras pandemias, formaron parte del primer bloque del discurso de Illa, donde hizo sus planteamientos sobre lo que necesita el sistema sanitario. Junto a estas medidas, planteó la necesidad de desarrollar reservas estratégicas de material por parte de las autonomías, a lo que contribuirá también el Ministerio de Sanidad, con otra reserva de refuerzo.
Además de las compras, se refirió al impulso a la producción nacional, para lo que ya se ha contactado con varios fabricantes nacionales que ya venían produciendo, así como para la reorientación de otros de sectores afines. También aludió, en lo que respecta a los equipos de respiración asistida, a los trabajos con dos fabricantes a nivel nacional (Hersill y Escribano) para que multipliquen su capacidad.
Como no podía ser de otra manera, abogó por reforzar los sistemas de vigilancia epidemiológica, y una acción que consideró clave es "apuntalar la integración automática y en tiempo real de los datos de la historia clínica electrónica de los centros sanitarios, para aumentar la velocidad y la cantidad de la información". "Reforzar la vigilancia implica también dimensionar y dotar de forma adecuada los equipos de profesionales en todos los niveles administrativos", añadió.
Y en línea con ese apoyo a los investigadores nacionales que mencionaba al representante de VOX, se refirió también, "pensando en el futuro de nuestro país", a la necesidad de desarrollar "un modelo productivo competitivo que aporte recuperación y desarrollo social tras la pandemia". Parte de esa apuesta pasaría, según él, por "potenciar el Instituto de Salud Carlos III, para que crezca y atraiga un ecosistema en el que pueda seguir asentándose un tejido empresarial e industrial biomédico y biotecnológico competitivo a nivel internacional".
Illa apostó además por "fortalecer el sistema sanitario público", con más financiación (citó el compromiso del 7% del PIB adquirido por el Gobierno de coalición), "pero también iniciar las transformaciones necesarias para que pueda atender las necesidades actuales y de futuro". Rafael Mayoral, de Unidas Podemos, llamó a la "reversión de las privatizaciones", un planteamiento con el que el ministro se mostró "de acuerdo", pero recordó que las CCAA "tienen competencias" en la prestación sanitaria y cada una decide el modelo que quiere seguir.
Refuerzos de la Atención Primaria y la Salud Pública
Esa transformación del sistema público que propuso el titular de Sanidad incluye una potenciación y refuerzo de la Atención Primaria "con más recursos". Recursos financieros, humanos, y también tecnológicos, ya que el ministro considera que las intervenciones basadas en la teleasistencia obligadas por Covid-19 se han revelado como "beneficiosa para los pacientes, al prevenir complicaciones, y para el sistema, al reducir el impacto sobre los hospitales". En este sentido, ha opinado que "la trasformación digital en salud y el avance en usos de tecnologías para la telemedicina centrada en el paciente es un proceso urgente, que nos ayudará a añadir valor al tiempo dedicado tanto por los profesionales sanitarios como para los pacientes y promover la salud y el autocuidado".
Igualmente, puso de manifiesto su convicción de que hay que "dotar a la Salud Pública de las estructuras y recursos que requiere, no solo para la vigilancia epidemiológica, sino para promover la salud y la educación para la salud, para impulsar estilos de vida saludables, para, en definitiva, lograr un sistema preventivo y no solo curativo, que genere salud y no solo sanidad".
En este punto, calificó como "necesario" el desarrollo de la Ley General de Salud Pública, que, recordó, prevé la creación del Centro Estatal de Salud Pública. "Este podría ser un punto de partida para reordenar e impulsar una parte de las funciones que deben desarrollarse y reforzarse desde la Salud Pública, como es la vigilancia, la evaluación de impacto en salud o la preparación y apoyo a la respuesta ante emergencias sanitarias, entre otros aspectos", precisó.
Finalmente, se refirió a la necesidad de consolidar el refuerzo del personal sanitario que se ha producido durante la pandemia, un refuerzo que, dijo, "no puede ser puntual". "Hay que dimensionar los equipos sanitarios de acuerdo a las necesidades y prever el refuerzo de plantillas ante posibles nuevos brotes. Los profesionales sanitarios son el elemento esencial del Sistema Nacional de Salud y, por tanto, debemos trabajar para mantener su prestigio, reconocimiento y la calidad de la atención", declaró. Además, se mostró de acuerdo con Mayoral en que acabar con la precariedad y temporalidad es una medida urgente.
Finalmente, cabe destacar las diferentes menciones que se hicieron durante la comparecencia a la posibilidad de un acuerdo en materia de Sanidad, que desde diversos ámbitos se viene reclamando. Illa tendió la mano a todos los partidos para tratar de superar las diferencias. El portavoz de Ciudadanos, Guillermo Díaz, juró lealtad al Gobierno, "gobierne quien gobierne, ante futuras pandemias" (no está claro que eso implique disposición para llegar a un Pacto por la Sanidad), en un claro desmarque de las posiciones beligerantes mostradas por PP y VOX. Pastor, sin embargo, escenificó un posible cambio de posición de su partido al afirmar que estarán "en un Pacto de Estado con medidas que sirvan para mejorar la gobernanza del SNS y el sistema de Salud Pública, incluyendo la AP" y a otras estructuras.