La Plataforma de Organizaciones de Pacientes aprovechó el 11º Día Europeo de Derechos de los Pacientes, para reivindicar, de la mano de la Active Citizenship Network (ACN), la adopción de nuevas fórmulas que garanticen el acceso a la innovación terapéutica por parte de los pacientes de toda Europa, una reclamación que tendrá su continuación el próximo 10 de mayo, con la participación de la POP en la convención de la ACN que tendrá lugar en el Parlamento Europeo. Allí se discutirá, informará y sugerirán nuevos enfoques de los actuales sistemas europeos y nacionales de regulación de medicamentos, para una mejor gestión del acceso a la innovación y se espera que se asuman nuevos compromisos para mejorar el respeto de los derechos de los pacientes y su participación en los procesos de elaboración de políticas y reglamentación a nivel nacional y europeo.
Desde la Plataforma de Organizaciones de Pacientes, se ha aprovechado además para trasladar a los grupos parlamentarios la necesidad de poner en pie un Plan de Estado para el acceso a los tratamientos innovadores de última generación: "No podemos dejar a la discreción de los gestores de los distintos niveles (estatales, autonómicos y de cada hospital) ni a la disponibilidad de presupuesto que los medicamentos lleguen a los pacientes: el tiempo corre en nuestra contra. Por eso proponemos un Plan nacional que garantice la financiación de los medicamentos de última generación que hayan demostrado su coste-efectividad", subraya el presidente de la Plataforma de Organizaciones de Pacientes, Tomás Castillo.
Esta petición se deriva del hecho de que en España, comentan desde la POP, se producen retrasos en el acceso a los medicamentos. Así, continúan, "desde que tiene lugar la aprobación por parte de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) pueden pasar meses e incluso años hasta que ese medicamento llega al paciente español". Como ejemplos, se refieren a un fármaco que corrige el defecto que origina la sintomatología de la fibrosis quística (ivacaftor-lumacaftor), que fue aprobado por la Agencia Europea del Medicamento en noviembre de 2015 y está indicado para pacientes con dos copias de la mutación F508del, que afectaría a unas 500 personas en España.
Desde la Federación Española de Fibrosis Quística recuerdan que esta falta de acceso no se da en otros países de la Unión Europea, que cuentan con distintos modelos de financiación, y usan como ejemplo la partida económica específica por parte del Gobierno escocés para costear los tratamientos; o Italia, donde la ley 548/93 establece que las personas con fibrosis quística tendrán acceso gratuito a todas aquellas medicaciones que demuestren valor terapéutico para ellas y deberán serles suministradas siempre que su médico las haya prescrito con independencia de su situación en cuanto a comercialización en su país. También en Francia tienen el sistema de acceso adelantado o autorización previa (ATU), que permite el uso de fármacos que aún no han completado el proceso de financiación.
En el caso de España, y a pesar de que la Agencia Española del Medicamento (Aemps) dio su autorización en julio de 2016 a este medicamento, es necesaria la autorización de financiación del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, hecho que aún no se ha producido.
Otros casos de retraso en el acceso
Por su parte, desde la Federación Española de Enfermedades Raras (Feder) explican que, a día de hoy, en Europa hay ya 95 medicamentos huérfanos autorizados, de los cuales, en España sólo se han comercializado 53, según datos de la Asociación Española de Laboratorios de Medicamentos Huérfanos y Ultrahuérfanos (AELMHU). En el comunicado sobre su Día Mundial, daban más detalles sobre esta situación. En cuanto al uso compasivo, desde Feder afirman que "la autorización de acceso individualizado conlleva demasiada burocracia, cuando se está tratando de una cuestión vital y cuando en muchas ocasiones el acceso por uso compasivo ya cuenta con una autorización condicional de la Agencia Europea del Medicamento (EMA)".
La Federación Española de Asociaciones de Anticoagulados (Feasan) reconoce que no existe actualmente ningún fármaco a la espera de aprobación. Sin embargo, dicen, "hay comunidades en las que el acceso resulta limitado principalmente por barreras económicas".