La industria tiene en IMI el mejor ejemplo del valor de la colaboración público-privada en I+D biomédica

Las asociaciones de la industria farmacéutica y biofarmacéutica con presencia en España han organizado, junto al CDTI y el Instituto de Salud Carlos III, una jornada conmemorativa para conmemorar el 10º aniversario de la puesta en marcha de la Iniciativa Europea de Medicamentos Innovadores (IMI), que cuenta con financiación al 50% de la Comisión Europea y la Federación Europea de la Industria Farmacéutica (Efpia) y que ha resultado en unas inversiones de 5.300 millones de euros para un total de 107 proyectos público-privados en I+D biomédica. Los representantes de Farmaindustria y Asebio han subrayado, durante la jornada, la importancia de la colaboración público-privada en este ámbito.

Durante el encuentro, se puso de manifiesto la participación de las empresas con actividad en España, que han jugado un papel decisivo en iniciativas como IMI Eupati, que busca potenciar la participación de los pacientes en el proceso de I+D de medicamentos; IMI Do-It, cuyo objetivo es el aprovechamiento de la información clínica disponibe a través de herramientas de Big Data, o Harmony, que tiene como fin encontrar tratamientos más eficaces para los tumores hematológicos reutilizando para ello datos de pacientes con técnicas de big data.

También se mencionaron otros proyectos con participación española (a través de entidades de diverso tipo) como EMIF, para la utilización de datos clínicos en la investigación biomédica; Open PHACTS, que persigue generar nuevo conocimiento en I+D farmacéutico haciendo legibles, para aplicaciones informáticas, los datos clínicos, y eTOX, proyecto que tiene como objetivo predecir la toxicidad de medicamentos en fases tempranas de I+D mediante el análisis integrado de casuística acumulada en la industria farmacéutica.

Finalmente, se puso en valor el hecho de que, a lo largo de estos 10 primeros años de IMI, España se haya convertido en el sexto país de la Unión Europea con mayores retornos derivados de la iniciativa, con un 5,9% del total contabilizado en la Unión Europea, y subvenciones por valor de 88 millones de euros. Por delante quedan Reino Unido (28,6%), Francia (14,7%), Holanda (13,8%), Alemania (12,7%) y Suecia (5,9%). Además, las entidades españolas están presentes en 58 de las 112 actividades financiadas por IMI (el 52% del total), siendo responsables de la coordinación de seis de ellas (el 5,4%). En lo que se refiere en concreto a la segunda convocatoria de la Iniciativa (IMI-2), que se desarrolla en el periodo 2014-2020, la participación de entidades de nuestro país ha aumentado hasta el 8%.

Desde Asebio han querido remarcar que, de las 69 organizaciones españolas participantes en IMI, 55 son centros públicos y 14 empresas privadas. Un 20% de las que han recibido financiación, además, pertenecen al ámbito biotecnológico. En total, las empresas de la Asociación habrían captado 9,22 millones de euros, el 10,4% del total, y algunas de ellas han colaborado in kind, es decir, aportando material, instalaciones, etc.

La importancia de la colaboración público-privada

Uno de los participantes en la jornada fue Javier Urzay, subdirector general de Farmaindustria, quien ha afirmado que, a día de hoy, "la inmensa mayoría de los proyectos de I+D biomédica necesita de la colaboración de profesionales sanitarios, hospitales y centros de investigación públicos y privados, reguladores, organizaciones de pacientes y compañías farmacéuticas y biotecnológicas". "Se trata de una nueva forma de trabajo que comenzó tímidamente hace diez años y que hoy ya no tiene vuelta atrás", ha subrayado. ,

Por su parte, el presidente de Asebio, Jordi Martí, ha asegurado que "la financiación con fondos europeos de proyectos españoles ha sido fundamental para el avance del sector biofarmacéutico en los últimos diez años en nuestro país", y ha defendido la apuesta por iniciativas como ésta "para tener un puesto destacado en el mapa de la innovación farmacéutica mundial".

Pese al éxito cosechado en estos años, Urzay llamó a seguir trabajando para aumentar la presencia española, tanto del sector público como del privado, en los distintos consorcios IMI, ya que "esta participación trae importantes retornos científicos y económicos al país". Como ejemplo de ello, además de la participación de las instituciones, centros y compañías farmacéuticas, puso la presencia de personalidades españolas relevantes en el Comité Científico de IMI, como ha sido el caso de Ferrán Sanz, Cristina Avendaño, María Blasco y María Dolores Navarro, y, ya más recientemente, de Alfonso Valencia y Eduard Montanya.