Cuatro terapias de anticuerpos monoclonales y un inmunosupresor son los cinco primeros fármacos que la Comisión Europea ha elegido para estudiar su integración en la futura cartera común de medicamentos, que la UE tiene previsto desarrollar para hacer frente al covid-19.
Esta cartera común acordada por los Estados miembros dentro de la estrategia europea frente al covid-19, funcionará de forma similar a la actuación que se ha venido manteniendo con las vacunas, a través de compras conjuntas, según informa la Comisión en un comunicado.
“Los cinco productos están en una etapa avanzada de desarrollo”, asegura el Ejecutivo europeo en el comunicado, señalando que tres de los cuatro anticuerpos monoclonales podrán ser autorizadas por la Agencia Europea del Medicamento (EMA) para octubre 2021, “siempre que demuestren su seguridad, calidad y eficacia”.
Los anticuerpos monoclonales son una combinación de bamlanivimab y etesevimad, de la compañía Lilly, otra combinación de casirivimab e imdevirmab, de Regeneron y Hoffman; además de regdannivimab, de Celltrion y sotrovimab, de GSK y Vir Biotecnology.
En cuanto al inmunosupresor se trata de baricitinib, sobre el que su empresa desarrolladora, Eli Lilly ha solicitado una extensión de la autorización comercial, para que pueda ser usado en pacientes con covid-19.
El objetivo de la Comisión Europea es tener una cartera de al menos diez medicamentos, que serán seleccionados a través de criterios que aporten los Estados miembros. Para octubre se espera que la autorización al menos de tres de ellos y otros dos para final de año.
“El virus no desaparecerá y los pacientes necesitan tratamientos seguros” ha indicado la comisaria de Salud Stella Kyriakides. El objetivo según esta comisaria es conseguir que la Unión Europea identifique aquellos fármacos candidatos para que formen parte de la cartera europea.