La presentación de mapEA y Alma-Care ha sido el foro en el cual Pablo Martínez Lage, director científico del Centro de Investigación y Clínica Memoria de la Fundación CITA-Alzheimer; Raquel Sánchez del Valle, especialista en Neurología en el Servicio de Neurología del Hospital Clínic de Barcelona y Coordinadora del Grupo de Estudio de Conducta y Demencias de la Sociedad Española de Neurología (SEN); Pablo Baz, coordinador del Grupo de Trabajo de Neurología de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen); Jesús Rodrigo, director de CEAFA, y José A. Sacristán, director médico de Lilly España y Portugal han compartido su satisfacción por las mejoras en el manejo de la enfermedad de Alzheimer y la preocupación por la falta de recursos del SNS para optimizarlas en todo el territorio español. En el encuentro también han ofrecido una serie de recomendaciones clave en este campo.
Según ha explicado Martínez Lage, el segundo proyecto para cartografiar la atención al alzhéimer en nuestro país documenta avances en materia de diagnóstico, pero también una reducida implantación del plan nacional, con solo cuatro comunidades autónomas en las cuales hay operativos programas específicos de atención a estas personas (Andalucía, Cataluña, Extremadura y Valencia). Comparado con el retrato de 2017 (el primer mapEA) han aumentado las consultas o unidades especializadas y se han observado mejoras tecnológicas (sobre todo en cuanto a PET, ya que prácticamente se ha duplicado la disponibilidad de equipos.
No obstante, también se ha podido ver que existen pocos protocolos para la operatividad entre atención primaria y especializada, y escasea el conocimiento sobre los mismos.
“Cuando se derivan a neurología, es frecuente que los pacientes hayan acudido dos o tres veces a la consulta de primaria; en general el proceso de derivación consume tres meses, seis el diagnóstico, a los que hay que añadir las pruebas, el proceso completo puede tardar entre ocho y 12 meses”, ha indicado.
Raquel Sánchez se refirió a las nuevas terapias para la enfermedad partiendo de la observación del comité científico de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) sobre la necesidad de excluir perfiles de riesgo (que se seleccionan por genotipado), lo cual implica que, por un lado los candidatos a recibirlas no serán numerosos y, por otro, que las pruebas deberían estar disponibles en los centros donde se atienda a estas personas.
Jesús Rodrigo aprovechaba su turno de intervención para añadir que “por pocos que sean [los pacientes candidatos a recibirlas], la cifra será más elevada que la actual, que es cero”.
Martínez Lage ha declarado que “sigue existiendo desigualdad en función del código postal en el acceso de las personas a un diagnóstico a tiempo y certero”. Considera que en España hay zonas en las que la coordinación entre Atención Primaria, la atención especializada y, más aún, la atención superespecializada en deterioro cognitivo, es más ágil y eficaz que en otras. “Afortunadamente, los nuevos datos de mapEA constatan, en comparación con la anterior edición, que el número de unidades especializadas o de consultas monográficas en deterioro cognitivo ha crecido sensiblemente”. ha añadido.
Pablo Baz ha recordado que “para garantizar un diagnóstico temprano y de precisión, es necesario aumentar las capacidades de Atención Primaria. Solo así podremos ofrecer tratamientos más efectivos, mejorar el pronóstico y la calidad de vida de los pacientes, reducir los costes sanitarios y facilitar la planificación de la enfermedad a las familias”.
“Es fundamental avanzar en el diagnóstico temprano y de precisión y mejorar la gestión del alzhéimer para ofrecer a los pacientes más años de vida autónoma e independiente. Si tomamos ahora las medidas necesarias, y desarrollamos una ruta asistencial sencilla y eficiente, podríamos ayudar a revolucionar el abordaje de la enfermedad de Alzheimer en beneficio de los pacientes y sus familias”, ha señalado José A. Sacristán.











César Hernández, director general de Cartera y Farmacia del Ministerio de Sanidad:
Kilian Sánchez, secretario de Sanidad del PSOE y portavoz de la Comisión de Sanidad del Senado.:
Rocío Hernández, consejera de Salud de Andalucía:
Nicolás González Casares, eurodiputado de Socialistas & Demócratas (S&D - PSOE):
Juan José Pedreño, consejero de Salud de Murcia: