Sanidad anima a la farmacia a elevar una propuesta para devolver los DH

La oficina de la farmacia debería presentar un proyecto a la Administración que demostrara las virtudes de dispensar medicamentos que en estos momentos el paciente sólo puede adquirir en las farmacias de hospital, especialmente los medicamentos de diagnóstico hospitalario y dispensación hospitalaria (DHDH). Este fue el mensaje del director general de la Cartera Básica de Servicios y Farmacia del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Agustín Rivero, para animar al sector a trabajar por el retorno de medicamentos hospitalarios a la farmacia comunitaria, y se mostró abierto a que esto suceda. Así lo expresó durante la mesa de debate sobre sostenibilidad de la prestación farmacéutica celebrada durante la 20ª edición del Congreso Nacional Farmacéutico, celebrado del 19 al 21 de octubre en Castellón.

En su opinión, la clave se encuentra en estudiar la medida en profundidad en términos de costes. Recogiendo el guante de Rivero, el secretario General del Consejo General de Colegios de Farmacéuticos, Luis Amaro, afirmó que se está trabajando para presentar una propuesta viable, y que espera que las comunidades autónomas la acojan positivamente.

Otros representantes del sector también manifestaron estar de acuerdo con la dispensación de medicamentos hospitalarios en las oficinas de farmacia, como Eladio González, presidente de la Federación de la Distribución Farmacéutica, Fedifar. En su opinión, es necesario buscar fórmulas desde el punto de vista económico para compensar el margen de la oficina de farmacia y la distribución, aunque, en este sentido, apuntó que una dispensación desde la farmacia comunitaria ahorraría importantes gastos a la farmacia hospitalaria.

Necesidad de pacto político y gobierno estable

Los ponentes de esta mesa de debate coincidieron en que, para lograr una estrategia que permita la sostenibilidad del sistema, es necesario un consenso alcanzado por todos los partidos políticos, es decir, un pacto por la Sanidad. Del mismo modo, el hecho de disponer de un gobierno estable facilitaría el disponer de una ruta definida en cuanto a la viabilidad sanitaria.

Esta necesidad puede aplicarse al pacto alcanzado hace un año entre el Ministerio de Hacienda y la industria farmacéutica. Tal y como afirmó el subdirector general de Farmaindustria, Javier Urzay, por parte de la patronal hay voluntad de tirar para adelante con este acuerdo, aunque dependerá del gobierno que se forme.

Durante el debate, los representantes de cada uno de los agentes defendieron su aportación a la sostenibilidad del sistema y reclamaron cómo mejorarla. Fue el caso del director general de la Asociación Española de Medicamentos Genéricos (Aeseg), Ángel Luis Rodríguez de la Cuerda, que manifestó que la normativa no ayuda al desarrollo de estas especialidades y que su principal reivindicación, después de un mercado estancado hace dos años en torno al 40% de penetración en unidades en el mercado, es que la legislación no obligue a la marca a bajar su precio al del genérico para seguir estando bajo financiación.

Urzay apuntó sobre esta cuestión que de este modo se actúa en igualdad de condiciones en competencia, y destacó la medida aplicada en otros países consistente en que el paciente pague la diferencia de precio entre el genérico financiado y la marca.

Los medicamentos biosimilares también estuvieron presentes durante el debate. La directora general de BioSim, Regina Múzquiz, hizo hincapié en que debe haber un equilibrio entre los fármacos innovadores y las copias, y que deben poder convivir, entendiendo que el acceso a los medicamentos biológicos pasa por la existencia de los biosimilares. Eso sí, también señaló que le parece "legítimo" que haya "medidas de discriminacion positiva para mercados que están emergiendo" como fue el caso de los genéricos y es el de los biosimilares. A pesar de esta situación paralela, la directora general de Biosim también quiso poner el foco en las diferencias existentes entre genéricos y biosimilares.

La aportación del autocuidado

La aportación al sistema de los productos de autocuidado fue defendida por el director general de Anefp, Jaume Pey, que aseguró que un ciudadano sano tardará más tiempo en ser paciente y, por lo tanto, en consumir recursos en salud. Pey considera que debería hablarse más de los ahorros que esto genera, derivados de factores como que se evitan visitas al médico y gastos laborales. Con el fin de potenciar este mercado, propone entre otras medidas que las comunidades autónomas incorporen estos productos en el nomenclátor y en sus sistemas de prescripción electrónica.