Como ya es habitual cuando hay un cambio de máximo responsable del Ministerio de Sanidad, todas las entidades y agentes del sector se apresuran a realizar el protocolario saludo y ofrecimiento de colaboración, pero también aprovechan para poner encima del a mesa los asuntos más urgentes que requieran la atención del ministerio para su solución.
El presidente del Consejo General de Farmacéuticos, Jesús Aguilar, ha ofrecido a la nueva responsable ministerial “su voluntad y compromiso de diálogo y colaboración para avanzar en la eficacia y eficiencia del sistema sanitario y sociosanitario, ámbitos en los que el farmacéutico desempeña un papel fundamental”. Aguilar ha puesto a disposición de la ministra a toda la profesión farmacéutica para “continuar trabajando por y para el paciente, con el objetivo compartido de mejorar los resultados en salud y la calidad de vida de la población con la participación activa de los farmacéuticos”.
La patronal de la industria farmacéutica innovadora, Farmaindustria, por su parte, se ha ofrecido a Carcedo con el objetivo de seguir trabajando "por la calidad y el fortalecimiento del Sistema Nacional de Salud (SNS), el acceso de los pacientes a los nuevos medicamentos y el desarrollo industrial y del tejido investigador". Para conseguirlo, la industria considera que estos compromisos se materializan mediante la investigación y desarrollo de nuevos tratamientos; "en un modelo además más abierto y colaborativo" con el sistema sanitario y sus profesionales", además de en una "actividad empresarial internacionalizada y generadora de empleo altamente cualificado".
La industria de los medicamentos genéricos también ha dado la bienvenida a Carcedo. En nombre de Aeseg, su secretario general, Angel Luis Rodríguez de la Cuerda, ha confiado en “conservar la fluida relación e interlocución que siempre hemos mantenido con la administración sanitaria”. Aeseg le ofrece trasladarle en persona la situación actual del sector, así como “los objetivos y propuestas de desarrollo orientadas a potenciar la contribución del medicamento genérico a la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud y acceso al medicamento en beneficio del paciente”.
Por su parte, Fenin ha aprovechado para ofrecerse a trabajar en uno de los “retos más urgentes de la Sanidad como son la obsolescencia del equipamiento tecnológico instalado en los hospitales, la designación del organismo notificado español a los nuevos reglamentos europeos de productos sanitarios, la mejora de la calidad asistencial y la digitalización del sistema sanitario para dar respuesta a la cronicidad y al envejecimiento de la población”.
La industria del autocuidado, a través de Anefp también ha querido trasladar a la nueva ministra “toda la colaboración del sector de autocuidado en la puesta en marcha de iniciativas que fomenten la educación en salud de los ciudadanos y contribuyan a la sostenibilidad del sistema sanitario”.
También los pacientes han querido trasladar su mensaje a Carcedo. La Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP) ha aprovechado para reivindicar ser recibidos por la ministra poniendo de manifiesto que no tuvieron esa oportunidad con Carmen Montón. La POP “confía en que la nueva responsable de la cartera de Sanidad sí reciba a esta organización que reúne a más de 1.200 organizaciones de pacientes y representa a unos 10 millones de personas en España. La recién dimitida ministra, no se ha sentado con la Plataforma en sus 101 días de mandato” explica en un comunicado. Y eso, según su presidente, Tomás Castillo, “no es una buena noticia para el Sistema Nacional de Salud”.
Al igual que otras organizaciones profesionales, el consejo de enfermería ha felicitado a la ministra y, en sus palabras ha trasladado los retos de la profesión. Entre ellos, “la amenaza que supone para los pacientes y para la sanidad pública el movimiento autodenominado ‘farmacia comunitaria’”.