Varios consejeros han mostrado, a su entrada al Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, donde se celebra una nueva edición del Consejo Interteritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), su disconformidad con la elección de los centros para la administración de las terapias CAR-T. De hecho, varios de ellos ya han avanzado que solicitarán una revisión en los próximos seis meses, con el objetivo de que haya un reparto más equitativo por el territorio.
Cabe recordar que, como adelantó Diariofarma, se han designado un total de ocho centros para adultos, tres en Cataluña, dos en la Comunidad Valenciana y uno en Madrid, Castilla y León y Andalucía, y otros tres para población infantil, dos de ellos en Cataluña y otro en Madrid. Este reparto ha generado las quejas de consejeros como el madrileño Enrique Ruiz Escudero, o el navarro, Fernando Domínguez. Tanto el navarro como el extremeño, José María Vergeles, han avanzado la solicitud de revisión en un plazo de seis meses, poniendo el énfasis en la necesaria "equidad" en el acceso de los pacientes de las diferentes zonas del territorio.
La ministra, María Luisa Carcedo, ha recordado que la elección de centros responde a unos criterios "que se han desarrollado con la participación de las comunidades autónomas", y ha puesto encima de la mesa que la prioridad, en este caso, deben ser "la calidad y la seguridad para los pacientes", poniendo en valor el hecho de que se haya primado "la experiencia".
En relación con las terapias CAR-T, también ha salido la cuestión de la financiación, aunque en principio no está incluida en el orden del día de este CISNS. Sobre este particular, el consejero de Sanidad de Castilla y León, Antonio María Sáez Aguado, ha considerado insuficiente la opción por la que optado el Ministerio, dejando la compensación entre autonomías a expensas de la dotación del Fondo de Cohesión. En este sentido, ha mostrado sus dudas de que sea una vía idónea para garantizar el acceso equitativo de todos los pacientes.
Sobre los desabastecimientos
El CISNS ha arrancado con polémica, ya que los consejeros de Gobiernos no socialistas han criticado la celebración del mismo por parte de un Gobierno que está en funciones. La ministra Carcedo ha justificado la celebración con "la obligación de la Administración sanitaria de seguir dando respuesta a cuestiones que son especialmente relevantes". Entre esas cuestiones ha incluido a los desabastecimientos y se ha referido al Plan diseñado por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps). "Una vez finalizado el documento, había que ratificarlo y darle vigencia", ha subrayado.
Sobre esta cuestión se ha pronunciado el consejero canario, José Luis Baltar, que ha confirmado que en su comunidad autónoma han tenido "alguna crisis" relacionada con problemas de suministro, pese a que las cooperativas tienen un stock superior para salvar las desventajas de la insularidad. Por este motivo, se ha mostrado de acuerdo con la necesidad de intervenir. Domínguez, por su parte, ha negado que Navarra se haya visto especialmente afectada por este problema, y ha opinado que las soluciones, para que sean efectivas, deberían buscarse "a nivel europeo".
Baltar también se ha referido a la introducción de la vacuna contra el meningoco W, Y, C y A en el calendario común, justificando la anticipación de su comunidad autónoma con sus particularidades epidemiológicas, y recordando que la decisión estaba avalada por sus técnicos. Vergeles volvió a sacar la cara por el Gobierno y defendió "la homogeneización" frente a las medidas unilaterales de otras regiones.