Terapéutica

Cataluña diseñará su nueva política del medicamento implicando a los profesionales

Cataluña está desarrollando su nuevo Plan Integral de Política del Medicamento (Pipmed), con el que trata de afrontar los retos futuros del ámbito del medicamento. En la actualidad está en marcha un proceso participativo para involucrar a los profesionales sanitarios.

El Área del Medicamento del Servicio Catalán de Salud (Catsalut) ha iniciado el diseño de su nuevo Plan Integral de Política del Medicamento (Pipmed). Se trata de “una apuesta estratégica para el uso racional y sostenible de los medicamentos en Cataluña”, tal y como lo describen desde el Departamento de Salud.

El Catsalut considera que, en un “contexto de constante innovación terapéutica y crecientes necesidades sanitarias”, es necesario que Cataluña lidere el “camino hacia un uso más racional y eficiente de los recursos farmacéuticos, asegurando un acceso equitativo a las nuevas terapias, sin comprometer la sostenibilidad del sistema”.

Para dar respuesta a estos retos, se pone en marcha Pipmed, cuyo objetivo principal es “garantizar un uso de medicamento centrado en la persona, basada en la evidencia y eficiencia, de calidad y seguro, velando por la innovación, la equidad y la sostenibilidad, con orientación a resultados en salud y generada con la implicación de los profesionales y de los ciudadanos”. Para lograrlo, tras una primera fase de estudio interno y análisis con algunos agentes del sector, se ha tratado de implicar a los profesionales sanitarios a través de un proceso participativo abierto a médicos, enfermeras, farmacéuticos y gestores con el objetivo de recoger sus opiniones e incorporarlas al diseño y desarrollo del plan, a través de una encuesta en la que pueden participar todos los profesionales que lo deseen.

Detalles de Pipmed

El Plan dispone de cinco líneas estratégicas, tres herramientas y seis principios. Las líneas estratégicas son están encabezadas por el impulso a una política del medicamento participativa, de modo que la política del medicamento sea cogenerada por los profesionales y coliderada por las entidades y que ayude a alinear el sector, y por los ciudadanos. En segundo lugar, se plantea una toma de decisiones con conocimiento que permita la generación de conocimiento compartido a fin de orientar la práctica asistencial en el uso de medicamentos hacia evidencia y eficiencia. La tercera línea estratégica se centra en la gestión clínica del medicamento, mediante el impulso de las estrategias de corresponsabilización de los profesionales en el uso efectivo, seguro y eficiente del medicamento y de disminución de la variabilidad y en la gestión de los recursos en el proceso asistencial integral. En cuarto lugar, se prevé un modelo territorial que aporte una visión poblacional y de territorio en el uso de medicamento con el objetivo de garantizar la equidad y calidad en la asistencia, en la atención farmacéutica y sobre todo en los resultados. Finalmente, se incluye una línea estratégica centrada en la evaluación y orientación en resultados con el objetivo de para ayudar a definir el valor real del medicamento y establecer estrategias de mejora e identificar las mejores prácticas en el proceso asistencial integral.

Para avanzar en estas líneas estratégicas se utilizarán una serie de herramientas entre las que destacan las herramientas de apoyo en las decisiones y los sistemas de información, que permitirán ofrecer la información necesaria en contenido, tiempo y forma a los profesionales asistenciales y de gestión de CatSalut y de los proveedores para facilitar la toma de decisiones en base a conocimiento basados en la evidencia y eficiencia y promover el liderazgo clínico y la participación del ciudadano. Además, se establecerá un nuevo modelo de contratación y compra de medicamentos y servicios. En este sentido, se pretende transformar el modelo de contratación y compra de medicamentos en el Sistema Sanitario Integral de utilización pública de Cataluña (Siscat), orientada al valor para que permita conocer los resultados y la eficiencia en el uso de los medicamentos. La tercera herramienta se centra en la comunicación, difusión, formación y transparencia, con las que se plantea impulsar la política de medicamento y buscar el alineamiento de los profesionales del Siscat y de los ciudadanos en la búsqueda de decisiones con conocimiento, promoviendo la transparencia de las decisiones.

Para el éxito de la iniciativa, desde el Catsalut son conscientes de la importancia de involucrar a los profesionales sanitarios desde el inicio. Por ese motivo, y de cara a “fomentar la alineación, empoderamiento y participación activa” de los profesionales sanitarios, y “garantizar el despliegue de estrategias y acciones que faciliten alcanzar mejoras significativas en el ámbito del medicamento del Siscat y en los resultados en salud de la población”, se ha puesto en marcha un proceso participativo que tiene dos fases. La primera de ellas, en ejecución actualmente, consiste en una encuesta a los profesionales sanitarios de diferentes ámbitos asistenciales y perfiles. Posteriormente, se llevarán a cabo hasta el próximo mes de marzo, una serie de sesiones presenciales deliberativas, mediante la organización de dinámicas participativas.

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