Más de 180 profesionales de la industria farmacéutica, pertenecientes a 70 laboratorios y representantes de Farmaindustria, la asociación de los biosimilares (Biosim) y la Asociación Española de Laboratorios de Medicamentos Huérfanos y Ultra Huérfanos (Aelmhu), asistieron ayer al V Foro de Farmacia y Medicamento CatSalut-Industria para conocer la reorientación del Servicio Catalán de Salud en el último año.
Entre los cambios más importantes, se encuentra la creación de una nueva Área del Medicamento que, según expresó el director de la institución, David Elvira, “trabajará para garantizar una utilización racional de los medicamentos en base a su eficacia y seguridad, así como en la evaluación de nuevos fármacos y la priorización de la prestación según su valor añadido”.
¿A qué se deben los cambios realizados? A la necesidad de hacer llegar los avances a los pacientes de manera equitativa, a las dificultades para identificar incertidumbres y la importancia de establecer criterios para introducir los nuevos tratamientos de forma razonada y racional. Los elementos clave de la reorganización del ámbito del medicamento del CatSalut son poner un mayor foco en los aspectos clínicos y resultados en salud y el deseo de simplificación de los procesos, la necesidad de garantizar la participación de los profesionales y ciudadanos y la voluntad de trasparencia, rendimiento de cuentas y evaluación de procesos.
Según expresó el director del Área del Medicamento, Josep Torrent, se persigue una coordinación de los diferentes procesos para dar una visión del medicamento “centrada en los resultados y que garantice el acceso a la innovación y la equidad y sostenibilidad del sistema sanitario”.
Tal y como ya informó Diariofarma, esta Área se estructura en tres gerencias: la de armonización terapéutica, que tiene como principales funciones la evaluación y posicionamiento farmacoterapéutico de los medicamentos; la de prestaciones farmacéuticas y acceso a los medicamentos, encargada de la gestión de las prestaciones farmacéuticas y la coordinación de las políticas de compra y acceso a la innovación; y la de acción territorial, que tiene como fin implementar criterios de uso racional en toda la geografía catalana y la relación con los diferentes proveedores.
