La necesidad de mejorar la investigación y el tratamiento del cáncer es el motor de la creación de la Red Oncológica Madrileña (ROM), impulsada por la Comunidad de Madrid y que celebró este miércoles en Madrid su I Jornada Internacional con la participación del director del Departamento de Relaciones con las Comunidades Autónomas de Farmaindustria, José Ramón Luis-Yagüe.
En su intervención, Luis-Yagüe destacó que la ROM “es una oportunidad para todos; para los pacientes, porque favorece la equidad en el acceso a los ensayos clínicos y acelera su realización; para los profesionales sanitarios, porque favorece la formación y la asistencia a sus pacientes, y para la industria farmacéutica, porque prestigia el sistema al mejorar la capacidad de realización de ensayos”.
“La colaboración entre la industria farmacéutica y las comunidades autónomas es fundamental para fomentar la investigación clínica en cáncer”, subrayó Luis-Yagüe. La posibilidad de trabajar en red, incidió, “es una oportunidad para avanzar en la investigación, porque facilita la puesta en marcha de los ensayos clínicos”.
Del mismo modo, recordó que mejorar el acceso a estos estudios y a los nuevos tratamientos es una prioridad, porque actualmente en España sólo se financian el 61% de los fármacos oncológicos autorizados en Europa, según el informe anual W.A.I.T., elaborado por la consultora Iqvia”.
Estos datos dejan a España en una situación similar a la media europea, pero muy inferior a países de referencia como Alemania (que financia el 100%) o Italia, Francia y Portugal (donde se financian más del 70%). “Necesitamos urgentemente una reforma de los procedimientos de precio y financiación para mejorar el acceso equitativo de los pacientes a los nuevos medicamentos, las nuevas terapias y a la innovación incremental”, señaló el portavoz de Farmaindustria, para quien la Red Oncológica Madrileña puede tener “un papel importante en este sentido”.
En este sentido, Farmaindustria está en contacto con los responsables de investigación de la ROM para analizar la viabilidad de la participación de compañías asociadas en algún proyecto piloto que permita la descentralización de los ensayos clínicos con un centro coordinador y centros satélites con la finalidad de que más pacientes de la comunidad madrileña tengan acceso a participar en estudios.