La sanidad gallega es reconocida dentro del Sistema Nacional de Salud (SNS) como puntera en algunas características como, por ejemplo, sus sistemas de información. En la actualidad sus responsables también quieren tirar de ese mismo “gen innovador” presente en sus profesionales y gestores, con el objetivo de convertirse en un hub de relevancia en el ámbito de las terapias avanzadas, abarcando desde la investigación al ámbito asistencial. Es, precisamente, en este último aspecto, en el que Galicia ha puesto en marcha ese mismo gen innovador para trabajar de forma innovadora y ofrecer a los pacientes gallegos recibir el tratamiento CAR-T, una vez que el Ministerio de Sanidad ha autorizado al Complejo Hospitalario Universitario La Coruña (CHUAC), para la administración de CAR-T, para LCM, MM y LDCBG en adultos: Este trabajo en red se realizará desde tres centros, de forma ordinaria, y en todas las fases del tratamiento con CAR-T, al incorporar a los Complejos Hospitalarios Universitarios de Santiago (CHUS) y de Vigo (CHUVI).
Para permitir esta situación, el Servicio Gallego de Salud (Sergas) ha establecido una organización en red con el objetivo de acercar estos tratamientos a los grandes núcleos de población y facilitar el trabajo colaborativo entre todos sus profesionales y centros, que trabajan como uno único. Además, la iniciativa previene problemas territoriales y ofrece una mayor integración y capacitación de los profesionales de los centros periféricos en la gestión de estos importantes tratamientos.
Así se puso de manifiesto durante el Encuentro de Expertos celebrado en Santiago de Compostela bajo el título ‘La incorporación de nuevos centros para la aplicación de los CAR-T’. Se trata del primer coloquio en el marco de un ciclo que tiene como objetivo principal analizar, a lo largo de distintas comunidades autónomas, los principales cambios que se han producido desde la ampliación de centros autorizados por el Ministerio de Sanidad para la administración de CAR-T. También se busca determinar cómo ha mejorado la experiencia y resultados de los pacientes al tener más próximo el lugar de tratamiento y si se ha ampliado el número de pacientes que pueden optar a ser tratados con estas terapias, así como los retos pendientes de resolver.
Para el abordaje de estas cuestiones, este primer encuentro ha contado con la participación de Jorge Aboal, director de Asistencia Sanitaria del Sergas; Luis Verde, gerente del CHUAC; Fernanda López, jefa Servicio de Hematología del CHUAC; Carmen Albo, jefa Servicio de Hematología del CHUVI; José Luis Sastre, jefe Servicio Hematología del Complejo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO); Laura Bao, adjunta del Servicio de Hematología del CHUS y Marc Obrador, director Senior de Kite España. El encuentro fue moderado por José María López Alemany, director de Diariofarma y contó con la colaboración de Kite-Gilead.
La apuesta gallega por estas terapias CAR-T ha sido destacada por el director del Sergas, que afirmó que Galicia “desde el principio ha apostado claramente por las Terapias Avanzadas” y así lo declararon en el seno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), donde explicitaron que “no solo iba a administrar sino también investigar y fabricar” estas terapias. Este objetivo estratégico requería, según Jorge Aboal, la creación de una red para el desarrollo de estas terapias. Con esta hoja de ruta han seguido avanzando e incorporando las terapias CAR-T en su cartera de servicios. El objetivo, enfatizó Aboal, es que “los pacientes puedan beneficiarse de un tipo de tratamiento disruptivo y novedoso” con un beneficio clínico significativo para pacientes con mal pronóstico y abriendo “la puerta con un nuevo enfoque para tratar a los pacientes”, en el que Galicia “quiere estar como punta de lanza”, explicó.
Esta comunidad autónoma cuenta con una red constituida para la aplicación de los CAR-T, según explicó Aboal. El director añadió que los CAR-T “no dejan de ser un fármaco” y, por tanto, la organización para su administración debería “dejarse a las comunidades autónomas como cualquier otro fármaco”. De esta forma, se ha posibilitado la actuación como centros administradores del CHUS y del CHUVI, que trabajan junto al CHUAC con el conocimiento del Ministerio de Sanidad. A este respecto, Aboal destacó que estos centros “cuentan con la concienciación de trabajar en red y de crecer en red”, algo para lo que es necesario continuar con este trabajo que “tiene que realizarse con la implicación de todos”. Además, tal y como explicó el director, el objetivo va más allá de trabajar de forma multidisciplinar dentro de los centros, ya que es necesario trabajar “como un único Servicio Gallego de Salud” en toda la geografía. Por ese motivo, tanto los centros derivadores como los administradores deben trabajar con los mismos protocolos e igualdad de criterios.
Aboal también aseguró que “el trabajo en red cuenta con más beneficios que un único centro de referencia” y afirmó que la importancia de los CAR-T no viene dada por lo que hay hoy, sino por el hecho de que estamos ante “el comienzo de todo lo que viene”; por ello, para él, cuánto más diversificado se tenga el conocimiento y los procedimientos que deban aplicarse y se cuente con una mayor masa crítica de profesionales formados, con experiencia previa, será más beneficioso. “En Galicia estamos sembrando para que la aplicación de nuevas terapias e indicaciones entren a toda velocidad y no sea necesario preparar nuevos centros y profesionales”, destacó.
Por su parte, la jefa de Servicio de Hematología del CHUVI, Carmen Albo, en sintonía con Aboal, afirmó que Galicia ha sido innovadora en cómo ha planteado el abordaje de estas terapias avanzadas que, en breve, según apuntó, no solo serán CAR-T. En este aspecto, Albo consideró que la apuesta gallega redundará no sólo en la llegada de medicamentos producidos por la industria sino en la producción de CAR-T académicos propios y de otras terapias celulares. Para ella, esta forma de trabajar y la incorporación de los tres hospitales ha sido una “decisión correcta”. En este sentido, apuntó que se ha producido un cambio radical ya que se ha pasado de una manera de trabajar jerarquizada a una forma de trabajo transversal y con plantillas de carácter multidisciplinar.
Luis Verde añadió que Galicia cuenta con “un gen innovador, además del gen integrador que ha posibilitado la creación de un modelo de gestión pionero”. Según el gerente del CHUAC, esta “cultura integradora” con la que cuenta la región, es posible gracias a la existencia de sistemas que lo soportan y a que la información se transmite de forma ágil, lo que permite el desarrollo del trabajo en red.
Verde también señaló que la llegada de los CAR-T supuso “un reto a nivel gerencial” para proporcionar y dar la oportunidad de utilizar estos tratamientos a los profesionales. Por ese motivo intentaron liderarlo desde la gestión, algo que, desde su punto de vista, “ha sido un éxito, gracias a la inquietud e intención que muchos profesionales y servicios tenían de formar parte del proyecto”. Por todo ello, el gerente del CHUAC estima “los resultados son buenos y las expectativas enormes”.
Igualmente, el responsable de Kite en España, Marc Obrador, destacó la revolución que han supuesto los CAR-T para los pacientes, ya que “ha sido un antes y un después” en muchas patologías, pese a que, como refirió, “estamos ante un momento aún incipiente de nacimiento de las terapias CAR-T”. En este sentido, se mostró convencido de que España cuenta con una oportunidad “muy relevante” para situarse como referente en este ámbito. Por ese motivo, Obrador ofreció su apoyo y mostró su deseo de formar parte de la estrategia para intentar ir de la mano con la Administración en beneficio de los pacientes, colaboración público-privada que fue bien vista por los gestores presentes en el encuentro por el evidente beneficio para los pacientes.
Obrador se refería al reciente acuerdo firmado con las tres universidades gallegas y los tres institutos de investigación con las consejerías de Sanidad y de Industria, que ha supuesto la creación de una red colaborativa para investigar y producir Terapias Avanzadas y que fue explicado por Luis Verde. Este acuerdo también fue valorado por Aboal que lo definió como “un hito para la historia”.
Beneficio para los pacientes
Los expertos participantes también destacaron, de forma unánime, que la llegada de los CAR-T ha supuesto un avance muy importante para los pacientes y un reto para los profesionales. Además, en relación con la ampliación del número de hospitales administradores, se señaló que ha supuesto acortar los tiempos para su administración.
A este respecto, Fernanda López, jefa de Hematología del CHUAC incluyó la importancia de la metodología que conlleva la administración de los CAR-T. Para ella, es esencial destacar que estas terapias permiten mejorar la calidad de la asistencia sanitaria. López añadió la necesidad de aportar un mayor número de recursos, tanto tecnológicos como humanos, para el abordaje de este tipo de tratamientos, ya que el crecimiento será exponencial, aseveró, y ya se están observando cuellos de botella en el uso de determinados equipos. Igualmente, reclamó recibir feed back de la información que los clínicos introducen en Valtermed para conocer sus resultados en comparación con otros centros. En este sentido, Verde afirmó que es importante transparentar los resultados que se están obteniendo, ya que es frustrante para los clínicos no poder acceder a estos resultados y poder precisar y definir qué es lo que está sucediendo.
Además, Albo ha destacado que “la revolución” es que cada vez se cuenta con un mayor número de indicaciones para la aplicación de estas Terapias Avanzadas. No obstante, quiso poner sobre la mesa que algunas indicaciones aprobadas por la Agencia Europea del Medicamento (EMA) aún no han sido financiadas en España, por lo que manifestó su deseo de que se financien para los pacientes españoles. Esta experta, también quiso resaltar que pasar de ser hospitales derivadores a hospitales administradores “ha producido una reducción de los tiempos de espera, que incluso irá mejorando”. Asimismo, también reconoció el esfuerzo de la industria farmacéutica, que ha reducido el tiempo de producción.
En sintonía con la hematóloga de Vigo, Lopez señaló que la introducción de nuevos centros administradores, que se han beneficiado de los circuitos y protocolos de los trasplantes alogénicos, ha facilitado el acceso a los pacientes e hizo hincapié en que para los pacientes es esencial no tener que desplazarse. Pese a ese beneficio, algunos de los presentes señalaron que esperaban un mayor número de pacientes de los que están tratando en la actualidad. Además, la hematóloga del CHUAC ahondó durante su intervención en la necesidad de “protocolizar y organizar”, ya que “llegan pacientes de otros centros sin las pruebas realizadas”. Por ello, planteó que es esencial la comunicación y tener en cuenta que, al intervenir más especialistas, será más complejo.
Por su parte, Laura Bao refirió que los CAR-T han supuesto un cambio de paradigma en la organización. Según ella, han abierto la puerta a muchísimas nuevas indicaciones y, desde su punto de vista, en consonancia con el resto de los participantes, estamos ante algo que “acaba de empezar”, por lo que el aumento de las indicaciones “deberá traducirse en un aumento de los centros que se especializan en estas terapias y por tanto administradores de estos tratamientos”.
Igualmente, el director de Kite aseguró que el futuro que viene con todas estas terapias celulares que, al día de hoy, están centradas principalmente en cánceres hematológicos, aumentará el impacto y el beneficio para los pacientes, ya que se está explorando en múltiples enfermedades y en estadios más tempranos.
Desde Orense, José Luis Sastre también destacó el reto que supone la administración de estas terapias CAR- T para los centros que han cogido el relevo, siendo ya la propia adaptación un reto y, a pesar de que se verá condicionado por la situación existente y los medios personales con los que se cuenta, es “una oportunidad única”, aseguró.
Este experto profundizó en los problemas existentes y, en este aspecto, destacó la importancia de las reuniones conjuntas para coordinación entre centros derivadores con los administradores. Además, para él, sería muy positivo contar con una continuidad respecto a las personas que sirven de enlace, ya que en su caso ha ido cambiando, lo que perjudica a la coordinación.
Bao mostró su acuerdo en la importancia de las reuniones y el trabajo en equipo. “El hecho de la implantación de estas terapias ha obligado a realizar nuevos protocolos”. Según dijo, los tiempos se irán acordando a medida que “vayamos cogiendo rodaje”, siendo necesario que también se avance a nivel nacional. “Todo avanzará y dependerá de la colaboración conjunta”, afirmó.
Actualización del Plan nacional de Terapias Avanzadas
En este contexto, Albo señaló la necesidad de introducir cambios en el Plan de abordaje de las terapias avanzadas en el Sistema Nacional de Salud: medicamentos CAR. Para la hematóloga del CHUVI, este plan situó a España “como ejemplo en su momento”, pero en la actualidad “no se ha evolucionado” y ha supuesto “un retraso”. Desde el punto de vista de esta experta, para las indicaciones que están tan claras y que ya están aprobadas desde hace tiempo, la centralización de la toma de decisiones “lo único que hace es retrasar”, por lo que, según ella, debería trasladarse la decisión a un comité autonómico, lo que “ayudaría a acortar tiempos”.
El representante del Sergas también planteó su actitud crítica respecto al Plan Nacional de Terapias Avanzadas. Según él, desde el principio el Plan “cojeaba en equidad y en la parte humana del paciente y de su entorno familiar”, al no tener en cuenta lo que puede suponer a los pacientes el tener que desplazarse a los centros de referencia designados. Por ello, Aboal afirmó que, dado que Galicia cuenta con magníficos profesionales, su objetivo principal será que los pacientes gallegos no continúen peregrinando. “Tenemos la estrategia y la oportunidad para que el paciente gallego pueda elegir”, aseveró.
Fernanda López también hizo hincapié en la importancia de acortar los tiempos para el inicio de los tratamientos, “algo esencial” ya que implica “obtener mejores resultados cuando se utilizan los CAR-T precozmente”. La hematóloga del CHUAC recalcó que hay pacientes que no llegan a recibir un tratamiento autorizado al evolucionar su enfermedad, por lo que abogó trabajar para intentar que la selección del paciente sea más precoz, así como avanzar en coordinación para evitar la realización reiterada de pruebas, así como intentar que los pacientes acudan preparados.
Estas afirmaciones fueron secundadas por Obrador, que aseguró que existen estudios que demuestran que “cuanto más se acorta la selección del paciente, cuánto más se acorta el tiempo entre el diagnóstico y el tratamiento, se obtienen mejores resultados”. Para el director de Kite España, es fundamental el trabajo en equipo en el sentido más amplio, contando con todos los centros, con todos los servicios de hematología, así como los servicios complementarios para obtener una atención óptima a estos pacientes. De hecho, según afirmó Obrador, los resultados obtenidos en España están al nivel de cualquier otro país.
A la espera de las nuevas indicaciones
La hematóloga del CHUVI también recordó que la autorización de nuevos centros se justificó hace un año por el Ministerio de Sanidad ante la inminente financiación de nuevas indicaciones para los CAR-T. Albo denuncia que “no sabe dónde están estas nuevas indicaciones, seguimos esperando”, pese a que ya están disponibles “en el resto de los países europeos”. A este respecto, consideró necesario que el precio de los medicamentos no impida su acceso, por lo que abogó por establecer acuerdos de riesgo compartido. En relación con esto, el director de Asistencia Sanitaria del Sergas matizó que el precio de las indicaciones “nunca puede ser la excusa para no abrir nuevas indicaciones o adelantar en las líneas, ya que son las comunidades autónomas quienes asumen la financiación” y rechazó que España “quede atrás” respecto de Europa en acceso a indicaciones autorizadas. Por su parte, el responsable de Kite señaló que el valor de estos medicamentos está ajustado a su precio, algo que corroboró Albo al afirmar que en pacientes en los que se alcanza un resultado positivo el coste total por paciente es inferior al de las terapias previas.