La semana pasada se celebró el IV Encuentro de Prestadores Sanitarios, de la Organización Española de Hospitales y Servicios de Salud, y en él participó, entre otros, Manuel Vilches, director general del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (Fundación IDIS), quien defendió que "la colaboración público-privada es la fórmula idónea para lograr un sistema sanitario sostenible y solvente en el tiempo, favoreciendo la accesibilidad y la rapidez en la realización de actos médicos, evitando duplicidades y riesgos innecesarios y con procesos de interoperabilidad que permiten que el paciente disponga de su información clínica y elija dónde ser tratado".
Desde la Fundación IDIS recuerdan que la cooperación con el sector privado tiene un fuerte arraigo en todas las comunidades autónomas y cuenta con una larga tradición, como muestran los conciertos que se llevan a cabo entre los servicios regionales de salud y los centros privados, el mutualismo administrativo y las concesiones administrativas que incluyen la gestión de servicios sanitarios bajo modelos PPP o PFI. A nivel económico, opinan, "no solo descargan a las arcas públicas de presión, con costes medios más ajustados por proceso, sino que contribuyen a aliviar significativamente las listas de espera, especialmente las que afectan a patologías de alta complejidad y generan un índice de satisfacción muy elevado entre quienes utilizan sus servicios". Por eso, defienden "el aprovechamiento de todos los recursos disponibles, independientemente de su titularidad", lo cual debería ser, apuntan, "un objetivo fundamental en la gestión eficiente y efectiva del sistema".
Sobre los conciertos, apuntan que se llevan en torno a 0,8% del PIB y se dirigen, entre otras, a actividades de hospitalización, diagnóstico por la imagen, transporte sanitario, terapias respiratorias y diálisis, "contribuyendo a desahogar las listas de espera y ofreciendo asistencia sanitaria en aquellas zonas geográficas en las que no se cuenta con infraestructura o dotaciones suficientes". También están los conciertos singulares, que vinculan a un hospital con el sistema sanitario público, integrando su actividad y objetivos en la planificación general del Sistema Nacional de Salud, para ofrecer asistencia sanitaria a un área poblacional concreta.
En lo que respecta a las concesiones, Fundación IDIS cree que surgen como "respuesta a la insuficiencia financiera de la Administración Pública, desde el punto de vista que permite que ésta asuma a largo plazo el gasto que supone el despliegue de infraestructuras sanitarias". Los servicios que puede prestar el concesionario pueden incluir, desde la construcción y el equipamiento del hospital; a la gestión de los servicios no sanitarios como, entre otros, limpieza, seguridad o restauración; la dotación de la alta tecnología, o la gestión de los servicios sanitarios, pudiendo incluir la Atención Especializada, la Atención Primaria y la atención de pacientes psiquiátricos y crónicos (modelos PFI y PPP).
Recuerdan, en este punto, "que se utilizan herramientas de gestión privada en hospitales públicos, en la cual las empresas privadas asumen los riesgos de la creación y el mantenimiento de la infraestructura, cumpliendo con los objetivos, garantizando los servicios de máxima calidad que exigen las administraciones públicas y manteniendo los principios de gratuidad y universalidad". En España existen ocho hospitales que operan bajo este modelo de concesión, la mayor parte ubicados en Madrid y la Comunidad Valenciana.
El mutualismo
Por último, hacen referencia al mutualismo administrativo, que, subrayan, "genera un enorme valor añadido al sistema, tanto en eficiencia financiera como en reducción en la presión asistencial (tiempos y listas de espera)", y recuerdan que "existen cerca de dos millones de funcionarios adscritos a él, siendo más del 84% los que eligen voluntariamente la sanidad privada año tras año". "En términos económicos, este modelo de colaboración aporta eficiencia y efectividad en la prestación de un servicio público, ya que el gasto per cápita de la población cubierta es sustancialmente inferior al gasto sanitario público per cápita", argumentan.
Con todo ello, desde Fundación IDIS apuesta, además de impulsar estas fórmulas. En esta línea, Vilches ofreció la mano tendida del sector privado "a las administraciones, para que tengan en cuenta la realidad de un sistema de titularidad privada que da cobertura a cerca de 11 millones de personas, que apuesta por la innovación y la renovación tecnológica y que cuenta con profesionales y equipos de gran prestigio y reputación con el objetivo de que todos los ciudadanos dispongan de la mejor sanidad posible, con los mejores resultados de salud, profesionales y centros y con la mayor eficiencia posible".