Weber, la Fundación Weber y Gilead han informado de la elaboración de un "mapa ideal del proceso asistencial integral de las terapias CAR-T en España", obra del grupo de expertos 2 del Proyecto RET-A, con el que pretenden complementar los avances del Plan Nacional de Terapias Avanzadas, contribuyendo al debate sobre el abordaje ideal de las nuevas terapias celulares y anticiparse así a los nuevos retos.
El grupo de expertos está compuesto, explican, por 11 profesionales sanitarios de primer nivel y un representante de asociaciones de pacientes oncológicos.
Durante varias horas de trabajo, estos expertos han distribuido roles y definido los procesos multidisciplinares para consensuar un circuito asistencial integral para la implementación de estas terapias, y proponer una serie de recomendaciones concretas de mejora del proceso. "La formación, la coordinación y la comunicación han sido señalados como los aspectos clave para garantizar un manejo seguro y eficiente de los pacientes candidatos a estas terapias", indican los promotores.
Explican también que se trata de la primera reunión técnica de las cuatro previstas, cada una de ellas con contenidos y expertos distintos que cubren todos los ámbitos relacionados con las terapias avanzadas.
Sonia García de San José, subdirectora gerente del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, ha señalado que "es necesario realizar una planificación correcta de los recursos asistenciales necesarios" para el abordaje de las CAR-T. También ha defendido la necesidad de que haya una "rendición de cuentas a la sociedad en estos tratamientos, a los que se dedican grandes recursos".
Por otro lado, Begoña Barragán, paciente, y presidenta de GEPAC y AEAL, también habría abogado por la transparencia a la hora de ofrecer información al paciente, quien ha de colaborar para poder recibir estas nuevas terapias que suponen "un mundo nuevo" para el tratamiento de sus patologías.
A su vez, Anna Sureda, jefa del Servicio de Hematología Clínica del Instituto Catalán de Oncología, ha destacado la importancia de las CAR-T, definiéndolas como una "nueva ventana para los pacientes onco-hematológicos" que traen consigo, además, "una nueva dimensión en lo que se refiere a innovación, investigación y sistemas de acreditación".
