En un mundo cada vez más digitalizado, es fundamental conservar y potenciar la parte humana de la profesión. Esta es una de las conclusiones de las diferentes charlas celebradas en el 76º Congreso Mundial de Farmacia y Ciencias Farmacéuticas, organizado por la Federación Internacional Farmacéutica (FIP), que ha tenido lugar en Buenos Aires del 28 de agosto al 1 de septiembre.
Que esta opinión, tan presente durante las jornadas congresuales, es una tendencia de futuro lo revela el hecho de que esta idea centrará el lema del próximo Congreso de la FIP, ‘Más allá de los medicamentos. El alma de la farmacia’, que acogerá Seúl (Corea del Sur) en 2017.
Una de las ponencias más destacadas sobre este asunto fue la del profesor Tom Zlatic, del St. Louis College of Pharmacy de Estados Unidos, participante de la mesa redonda sobre la repercusión de las herramientas tecnológicas en la profesión farmacéuticas, que confrontó la vertiente tecnológica y cognitiva del farmacéutico. En su opinión, los avances electrónicos tienen un efecto negativo sobre la empatía y no deben hacer perder el contacto humano, muy importante para el buen resultado de los tratamientos.
La contraposición entre las oportunidades y los riesgos que comportan en el sector farmacéutico las nuevas tecnologías también quedó plasmada en el debate titulado ‘Big data: ¿la Bella o la Bestia?’, moderada por el farmacéutico español Jaime Acosta, miembro del Comité Ejecutivo de la FIP. Aldo Álvarez-Risco, del Ministerio de Sanidad de Perú, puso sobre la mesa, por un lado, los beneficios del uso masivo de datos, como la rapidez de respuestas que es capaz de ofrecer, la optimización de las operaciones comerciales y la posibilidad de realizar campañas de Marketing más personalizadas u ofrecer nuevos servicios. Por otro lado, sin embargo, preocupan la calidad de los datos o las cuestiones de privacidad.
La utilización del big data por parte de la industria farmacéutica fue otra de las ponencias de esta mesa redonda, en la que la profesora Marion Schaefer, miembro de la FIP en Alemania, explicó que las grandes compañías han comenzado a hacer uso de estos datos en el proceso de investigación de medicamentos, aunque pasarán años antes de conocer el impacto sobre los resultados. A su parecer, la utilización de grandes bases de datos pueden cambiar las estrategias del reclutamiento de pacientes para ser incluidos en los ensayos clínicos.
Atención Farmacéutica centrada en el paciente
La importancia de que la Atención Farmacéutica se base en las necesidades de los pacientes centró otra de las mesas redondas, donde se evidenciaron las posibilidades en la realización de screening como servicio a potenciar desde las oficinas de farmacia.
Jurate Švarcaite, miembro de la Agrupación Farmacéutica Europea (PGEU) en Bélgica, destacó el papel de los farmacéuticos en el cuidado de las personas que creen estar sanas o que no visitan el médico, concretamente, en la detección de enfermedades crónicas o indicadores de riesgo. Esta experta explicó los pasos a seguir en la implantación de un servicio de screening para la reducción de la carga de morbilidad, que comienza por la toma de datos del paciente y la medición de la talla y el peso y de parámetros clínicos. El siguiente paso es el establecimiento de un plan de acción que ayude a reducir posibles riesgos, en continua comunicación con el paciente, al que hay que derivar al médico en caso necesario. La necesidad de hacer un seguimiento de la salud del paciente también es fundamental en la realización del servicio.
Las pruebas de screening a realizar desde la oficina de farmacia que se destacaron durante esa mesa redonda son la detección del riesgo cardiovascular, enfermedades musculoesqueléticas como la osteoporosis o la artritis, diabetes, depresión y desórdenes del sueño, enfermedades respiratorias y cánceres como el de mama, colon o intestino.
Participación española
La participación española en el Congreso ha sido relevante. En este sentido, destacó el evento celebrado en la embajada de España en Argentina, organizado por el Consejo General de Colegios de Farmacéuticos, al que acudieron profesionales españoles y representantes del sector y donde se puso en valor el modelo de farmacia español.
Una de las asistentes, la directora de Saludability, Inma Riu, que ofreció en una charla sobre redes sociales en el Congreso, considera que “el Congreso han puesto de relieve que la farmacia española avanza a buen ritmo y que, en muchos casos, es un ejemplo a seguir para el resto de países”.