Algunas herramientas y procedimientos tecnológicos que eran ciencia ficción hace unos pocos años son hoy una realidad implantada en la sanidad gallega. Y es que esta comunidad tomó una decisión estratégica hace ya más de una década, de apostar por la innovación en procesos y en tecnología y desarrollar un modelo propio de historia clínica electrónica que ha sido el eje de un cambio.
El detonante de esta apuesta es el convencimiento de que la sanidad debe adaptarse a la realidad y no al revés, y factores como la dispersión geográfica y el envejecimiento poblacional están siendo un reto dinamizador de un giro en el que Galicia apuesta por liderar el sector sanitario en materia de innovación.
La ciudad de Santiago acogió el pasado 25 de junio un encuentro de expertos centrado en este referente estratégico y titulado “Innovación en la atención sanitaria y uso de la tecnología. El caso de Galicia”. En la mesa estaban sentados Antonio Fernández Campa, gerente del Servicio Gallego de Salud (Sergas); Jorge Aboal, director general de Asistencia Sanitaria del Sergas; Beatriz Allegue, gerente de la Agencia Gallega para la Gestión del Conocimiento en Salud (ACIS); Julio García Comesaña, gerente de Gestión Integrada de Ourense, Verín y O Barco; Jorge Vázquez, Government Affairs & Pricing Manager de Esteve; y Fátima Rodríguez Maseda, de Acción Psoriasis Galicia. El moderador de la jornada fue el director de Diariofarma, José María López Alemany.
La historia clínica electrónica como hito
Todos los expertos participantes en el encuentro del entorno del Sergas coinciden en señalar el desarrollo de una historia clínica electrónica propia como un hito, que puso además a Galicia por delante de otras comunidades autónomas en materia de innovación. Según el director general de Asistencia Sanitaria del Sergas, con este sistema “somos referentes a nivel internacional”.
Lo que diferencia a este sistema del resto es que según Aboal, la historia clínica de Galicia, que es compartida para todos los centros desde 2007, “está centrada en el paciente”.
“Nuestra historia era como otras muchas, en carpetas, lo que teníamos en papel pero en formato digital, que no es poco. Ahora, lo que hemos hecho es romper las carpetas, y lo que vemos es el proceso completo del paciente”, así lo explicaba el gerente de Gestión Integrada de Ourense, Verín y O Barco. La herramienta permite ver toda la historia de un paciente de forma agrupada, transversal.
Pero no es casual que en su momento el Sergas apostara por un desarrollo propio que hoy se muestra a expertos de otras latitudes con cierto orgullo, sino que responde a un auténtico “ecosistema de innovación”, en palabras del gerente del Servicio Gallego de Salud.
El revulsivo de la innovación
La innovación ha sido considerada estratégica por los dirigentes de la sanidad gallega y esa cultura ha ido impregnando todas sus estructuras. E-saúde, Telea o Xare, son quizá términos que se han hecho conocidos entre quienes integran esta entidad pública y también entre muchos de sus usuarios y pacientes. Pero sobre todo hacen alusión a cuestiones que harán sostenible y eficiente la realidad gallega, caracterizada por la pérdida de población en los núcleos del rural y por la longevidad o cronicidad.
En 2016, ese ya maduro recorrido en materia de innovación, se plasmó en la creación de la Agencia Gallega para la Gestión del Conocimiento en Salud (ACIS). Su responsable, Beatriz Allegue, explica que ha servido para “aglutinar en un organismo público toda la cadena de valor de la I+D, desde su creación, investigación, pasando formación a docencia, así como la evaluación de las tecnologías sanitarias”.
Los responsables del sector sanitario público gallego hablan también de los polos de dinamización tecnológica existentes en las EOXI, cada una de las zonas geográficas en las que se divide la asistencia, donde hay profesionales que se reúnen para tratar temas de innovación. “Es como una mentalidad extendida. Estos tipos de mentalidades se extienden y son contagiosos. Las ideas fluyen. Hay ideas sorprendentes”, explicaba Aboal. A este respecto, señaló que “la innovación debe estar en la cabeza de forma continua y permanente”, por lo que consideró necesario “replantear los procesos para bucar mayor eficiencia”.
Del ambulatorio a la telemedicina
“Somos una población cada vez más longeva. Envejecemos más de lo habitual, no es una desgracia, es una suerte. En Galicia hay más de 2.000 personas que superan los cien años”. Así relataba el director de Asistencia Sanitaria la realidad de esta comunidad autónoma. Desde su departamento el reto es adaptarse a esta realidad sociodemográfica y territorial.
En Galicia existen 131 municipios y 469 centros de salud. Como indica su responsable, al envejecer, aunque el ambulatorio esté cerca el paciente va acusando la distancia, y al final el paciente acude solo cuando su proceso se ha agudizado. Proyectos como Telea, la plataforma tecnológica de Asistencia Domiciliaria, vienen a introducir la asistencia sanitaria en el propio hogar del paciente, de modo que la vigilancia se puede hacer desde el centro sanitario por parte del médico de atención primaria y la enfermera.
Aboal mencionó como los dos hitos gallegos en innovación la creación del 061 y todo el sistema de emergencias y la historia clínica electrónica. Pero el elemento más relevante si hablamos de futuro es la plataforma Telea de sanidad en el hogar. Y explicó que hay dos modalidades en las que se está implantando. Con la participación del paciente o bien con unos concentradores que recogen todas las mediciones en el ámbito doméstico y las envían a la historia clínica.
El paciente como centro del sistema
Tanto los pacientes, representados por Acción Psoriasis, como los dirigentes de la sanidad gallega mostraban su orgullo por los niveles de desarrollo tecnológico en materia sanitaria de nuestra comunidad. Fátima Rodríguez apuesta por el paciente como agente activo. “Pasamos de una época en la cual la sanidad eran compartimentos estancos. En cada consulta tenías que contar tú todo. Yo ahora acudo a mi médico y tiene todos los resultados, y lleva un seguimiento completo de mi enfermedad”.
A este respecto, Allegue explicó que una de las líneas de trabajo es la validación de aplicaciones móviles que puedan servir para introducir datos de forma automática en la historia clínica del Sergas, con lo que se mejora la recogida de datos y su sistematización sin que eso requiera de intervención de persona alguna. La prescripción de conocimiento y apps validadas, más allá de pautas de comportamiento y hábitos saludables, es otra de las líneas de trabajo.
También por el paciente, pero sobre todo por mejorar lo que en el sistema sanitario redunda en su salud y el control de la enfermedad, trabajan entidades como Esteve, compañía que ha colaborado en la realización de este encuentro. Su representante en la mesa, Jorge Vázquez, señala que desde el ámbito de la innovación ellos también quieren aportar soluciones en salud para lograr la accesibilidad y la eficiencia, más allá del ámbito farmacéutico.
A este respecto, Vázquez explicó que su compañía apostó en su día por proyectos como Medafar, de coordinacion entre el médico y el farmacéutico, o Expert Salud, una aplicación para móviles que redunda en una mejor adherencia del paciente a los medicamentos. Vázquez recordó que Esteve tiene el propósito de desarrollar innovación en I+D con centros académicos, lo que ha cuajado en alianzas con la Universidad de Santiago de Compostela, para desarrollar medicamentos para el dolor crónico, o en nuevas dianas terapéuticas. La compañía lideró el pasado año la actividad en la oficina española de patentes con 33 registros y es una buena muestra de la apuesta de la innovación sanitaria desde la perspectiva de la industria farmacéutica.
Liderar la revolución tecnológica
En lo que se refiere al tratamiento de patologías crónicas como la diabetes también se explicó lo mucho que se ha avanzado gracias al desarrollo tecnológico. “Tenemos medidores que registran 400 datos a la hora. Y admitimos que un aparato envíe los parámetros que se incorporan directamente a la historia clínica”, explicó García Comesaña. Otro ejemplo serían los sistemas cardioimplantables, recordó Aboal, “estamos haciendo una plataforma para descargar en cualquier centro de salud y que esos datos migren directamente al Sergas”.
Pero el futuro inmediato pasa también por otras cuestiones como la inteligencia artificial, por ejemplo para el análisis de Anatomía Patológica. El director de Asistencia Sanitaria explicaba que hay problemas que “se pueden detectar en una imagen que la máquina ve, y nos puede decir si se está desarrollando un cáncer de mama o hay una alteración en unas células”.
Texto y fotos: Carmen Delia Díaz
Nicolas Gonzalez Casares: