Según Miguel Hernán, catedrático de Epidemiologia en la Universidad de Harvard, los esfuerzos por coordinar la respuesta europea a la crisis sanitaria de Covid-19 se enfrentan con una dificultad clave: la falta de datos armonizados.
“Cuando vemos que los países adoptan medidas diferentes, lo que subyace es que unos no se fían de los datos que están proporcionando otros, sencillamente”, ha dicho Hernán durante su intervención en el encuentro.
Isabel de la Mata, asesora principal para la Gestión de Salud y gestión de crisis de la Comisión Europea, ha recordado que la legislación europea permite la adopción de medidas transfronterizas para la protección de la salud pública en virtud del artículo 168 del Tratado de Lisboa, pero en la práctica “ha habido respuestas dispares en los países de la Unión”.
Todos los ponentes, entre los que se encontraban también Pilar Aparicio, directorageneral de Salud Pública, Calidad e Innovación, Ministerio de Sanidad y Miembro del Comité de Gestión del Centro Europeo para la Prevención y Control de las Enfermedadesy María Jesús Lamas, directora de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS), coincidieron en pedir “más Europa” en la respuesta a la crisis y la preparación para potenciales situaciones similares en el futuro.
No obstante, también dieron fe de la dificultad de compilar y armonizar datos entre comunidades autónomas, hospitales y grupos hospitalarios en España, que alcanza una dimensión considerable cuando se abarca el ámbito de la UE.
Hernán matizó que hay ejemplos de armonización exitosos puestos en marcha por el Ministerio de Sanidad, aunque su ámbito sea reducido. Una de las sugerencias en cuanto al abordaje de la cuestión en Europa fue que la iniciativa fuera tarea de la Oficina Europea de Estadística (Eurostat).
Mejor acceso en virtud de la coordinación
María Jesús Lamas afirmó en el encuentro que la pandemia ha demostrado que una combinación de mayor flexibilidad y colaboración estrecha entre agencias reguladoras puede acabar acelerando la puesta en marcha de ensayos clínicos y el acceso a los medicamentos “sin comprometer la seguridad”.
La directora de la AEMPS ha puesto en valor la colaboración con la industria y con las agencias europeas durante la crisis.
También se ha mostrado partidaria de la recuperación de los procesos productivos en Europa para evitar la dependencia de otros mercados. “No se trata de revertir la globalización en absoluto, sino de recuperar la autosuficiencia en productos esenciales para la salud de la población”, ha afirmado.
Europa, vulnerable
Josep Borrell, alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, ha confirmado en la presentación del encuentro que “ha hecho falta que ocurriese esto para que nos diésemos cuenta de nuestra vulnerabilidad en algo tan fundamental como no disponer de una mascarilla ni de la capacidad de producción de medicinas, o los elementos constitutivos de las estas, porque el 80 % de los antibióticos están fabricados entre China e India”.
El experto ha manifestado en el Palacio de La Magdalena de Santander los riesgos de volver a la normalidad que existía antes de marzo. “Era un mundo con una excesiva dependencia, inseguridad financiera e irresponsabilidad ecológica. Espero que la vuelta a la normalidad no sea volver a esos parámetros de comportamiento”, ha explicado.
Durante toda la semana, Josep Borrell estará presente en la capital cántabra para debatir sobre el presente y el futuro de Europa tras la crisis del COVID-19. El Alto Representante dirige dos seminarios centrados en los esfuerzos europeos para salir de la crisis. El primero de ellos, “El futuro de Europa tras la crisis del COVID-19: situación actual, perspectivas y políticas clave para España”, ha comenzado este lunes.