A pesar de haber adquirido cierta relevancia a raíz de la pandemia, gracias al apoyo fundamental en la realización de ensayos clínicos con vacunas y nuevos medicamentos contra la Covid-19, lo cierto es la Farmacología que sigue siendo una especialidad poco conocida, que cuenta con escasos profesionales en activo en España (419, según datos del mes de enero) y que "no ha alcanzado aún el reconocimiento social que se merece".
Así lo aseguran desde la Sociedad Española de Farmacología Clínica (SEFC), donde consideran que “el papel de los jóvenes farmacólogos clínicos va a resultar crucial en los próximos años, tanto para animar a otros jóvenes a embarcarse en esta especialidad médica como para conseguir una mayor visibilidad social, que contribuya a que nuestra especialidad siga implantándose en los hospitales universitarios y en los sistemas de atención primaria de aquellas comunidades autónomas en las que no está presente aún", según explica su presidenta Antònia Agustí.
En ese sentido indican que “uno de los actores más relevantes” para dar a conocer la Farmacología Clínica en Europa es el grupo de trabajo Young Clinical Pharmacologists, que estos días se ha reunido dentro del 15º Congreso de la EACPT (European Association for Clinical Pharmacology and Therapeutics), en Atenas. Actualmente, el grupo está formado por miembros de España, Lituania, Rusia, Suecia, Croacia, Chipre, Italia, Noruega, Portugal, Eslovenia y Reino Unido, y trabaja en torno a tres ejes de acción: potenciar la formación de los jóvenes farmacólogos clínicos a nivel europeo, estimular proyectos de colaboración y “networking” y fomentar las oportunidades de movilidad y las rotaciones en Europa.
“Somos un grupo en continuo crecimiento, que nace con el objetivo de mejorar aspectos como la formación de los jóvenes especialistas, la investigación entre países y la colaboración entre diferentes centros europeos. Desde el inicio, hemos focalizado nuestros esfuerzos en convertirnos en una plataforma de trabajo en red para jóvenes farmacólogos clínicos en Europa y así fomentar el desarrollo de proyectos colaborativos y estancias formativas”, explica Carla Sans, especialista en Farmacología Clínica del Hospital Vall d´Hebron y presidenta de Young Clinical Pharmacologists, junto a su homóloga francesa, Émilie Jouanjus.
Durante la reunión del grupo en Atenas, se han abordado temas como el desarrollo de un borrador para impulsar un programa de becas de movilidad y de intercambio para jóvenes farmacólogos clínicos, financiado por la propia EACPT, o la actualización y puesta al día de un proyecto en educación y formación que busca recopilar información acerca de todos los programas nacionales de especialidad/residencia, a nivel europeo, para comparar su estructura, organización, requisitos, duración y competencias adquiridas.
“Este trabajo de análisis servirá a los farmacólogos clínicos en formación para saber qué áreas de capacitación se ofrecen en cada país, y dónde puede ir a rotar según sus intereses de formación; y, desde luego, ayudará a tener una imagen más global de la situación en Europa, ya que nos permitirá identificar variaciones internacionales o regionales en los programas de formación, y detectar cualquier posible desajuste entre países en relación a las oportunidades profesionales derivadas de nuestra especialidad médica ”, comenta Joaquín Sáez, miembro del grupo de trabajo.
Al mismo tiempo, la reunión ha servido para presentar públicamente la European Open Platform for Prescribing Education (prescribingeducation.eu), una plataforma online que tiene como objetivo mejorar y armonizar la docencia en Farmacología Clínica en Europa y el resto del mundo. “Algunos estudios previos a nivel europeo han demostrado que los estudiantes de medicina a punto de graduarse se sienten poco seguros para recetar medicamentos y cometen errores en los inicios de sus carreras profesionales”, afirma la presidenta de Young Clinical Pharmacologists. En este sentido, la plataforma tiene como objetivo “facilitar la colaboración y el intercambio de recursos innovadores para docentes entre universidades de distintos países”.
En paralelo, se está diseñando también un proyecto formativo que persigue “desarrollar, probar e implementar una evaluación estandarizada sobre prescripción segura en el plan de estudios de Grado en Medicina en la Unión Europea”. Como parte de este proyecto, se va a desarrollar una herramienta de evaluación en línea y un banco de preguntas para un futuro examen europeo de prescripción (European Prescribing Exam - EuroPE+). “Con la introducción de este examen, se espera mejorar y armonizar la calidad y cantidad de la docencia en Farmacología Clínica y Terapéutica en las facultades de Medicina, para contribuir así a la seguridad de la atención al paciente, disminuyendo el riesgo de errores de prescripción”, asegura la Dra. Sans. EuroPE+ estará coordinado por el Grupo de Trabajo de Docencia de la EACPT y se espera que esté disponible para todas las facultades de Medicina de la UE, de forma gratuita.
“Somos una especialidad minoritaria y poco conocida, es evidente. No obstante, está en las manos de los jóvenes farmacólogos clínicos, y especialmente en los que ahora se están formando, la posibilidad de contribuir a revertir esto en el futuro”, afirma Pau Alcubilla, otro de los miembros del grupo de trabajo Young Clinical Pharmacologists.
Ganar en visibilidad social, y dar a conocer el potencial de la Farmacología Clínica como especialidad encargada de velar por la seguridad de los pacientes, permitirá a esta rama de la Medicina seguir desarrollándose para terminar de implantarse en los sistemas sanitarios de salud. Además, la visibilidad es necesaria para atraer a futuros farmacólogos clínicos y fomentar nuevas vocaciones con las que poder asegurar el relevo generacional dentro de la especialidad.
En paralelo, se necesita también impulsar el conocimiento de la Farmacología Clínica por parte de otros profesionales médicos. “Los jóvenes farmacólogos clínicos tendrán que tener muy presente la necesidad de colaborar con otras especialidades para que aumente la visibilidad y la necesaria función de la Farmacología Clínica como especialidad médica”, añade Sáez, quien además explica que, a nivel nacional, resulta imprescindible impulsar más la consolidación de plazas estables de Farmacología Clínica en las Comunidades Autónomas, tanto en el ámbito académico como en el sanitario.