El secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, ha sido contundente al desechar cualquier posibilidad de que los medicamentos y productos sanitarios sin receta salgan de la oficina de farmacia para ser vendidos en otros establecimientos como los supermercados.
Durante un desayuno informativo organizado por Nueva Economía Forum, Padilla, como número dos del Ministerio de Sanidad, rechazó que productos como el paracetamol o los test de embarazo pudieran venderse en supermercados. El planteamiento de Padilla llegó tras una pregunta de un representante de Carrefour que se interesó por “cuándo” podrían venderse estos productos con el objetivo de hacerlos “más accesibles”.
La respuesta de Padilla fue clara: “No hay que confiarlo todo exclusivamente a la accesibilidad”. Pese a ello, el secretario de Estado, recordó que la oficina de farmacia comunitaria “proporciona no solo accesibilidad, sino que además ofrece la prestación de un servicio de atención farmacéutica especializada para las personas que acuden a comprar. Con esto quiero poner en valor lo que está haciendo la farmacia comunitaria”. Padilla explicó que, como Ministerio de Sanidad, deben “alinear” la prestación del servicio de dispensación con la atención farmacéutica.
Por este motivo, valoró muy positivamente la interlocución con el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF) para canalizar las iniciativas del Ministerio de Sanidad hacia las oficinas de farmacia. En este sentido, quiso “poner en valor el trabajo” de las farmacias comunitarias, destacando su “tremenda capilaridad” y su “capacidad para trabajar con profundo conocimiento de los pacientes”.
Este no fue el único mensaje positivo para la farmacia en la intervención de Padilla. El secretario de Estado también se comprometió, como ya había hecho anteriormente, a permitir mediante la modificación de la Ley de Garantías, que las farmacias puedan realizar sustituciones de formas farmacéuticas, como reconocimiento y “respeto” básico al trabajo que estos profesionales realizan. Igualmente, explicó que se prevé establecer un “canal de comunicación bidireccional” entre médicos y enfermeros de Atención Primaria y oficinas de farmacia. Esto se integrará en el Plan de Atención Primaria que está desarrollando el Ministerio y que también incluirá la creación de órganos de coordinación farmacoterapéutica entre profesionales de AP y la farmacia comunitaria.
Información económica sobre I+D y producción
En cuanto al ámbito del medicamento y la industria farmacéutica, las palabras de Padilla no trajeron demasiadas novedades. Habló de la Estrategia de la Industria Farmacéutica y de las modificaciones de diversas normas, como el Real Decreto de Evaluación de Tecnologías Sanitarias (ETS), la modificación de la Ley de Garantías y el próximo RD de precio y financiación.
Padilla se detuvo unos instantes para reflexionar sobre uno de los aspectos más polémicos del real decreto de ETS, el artículo que exige a las compañías farmacéuticas informar sobre los costes de investigación, desarrollo y producción. Aunque esta medida ha sido muy criticada por la industria innovadora, que solicitó su retirada, Padilla confirmó que se mantendrá. “Este Real Decreto va a avanzar en materia de transparencia tanto por parte del Ministerio de Sanidad como por parte de la industria farmacéutica”, señaló.
El secretario de Estado aclaró que el conocimiento de estos costes “no quiere decir” que se vaya a usar “exclusivamente” el precio basado en el coste de producción, “pero sí será un elemento más” para la toma de decisiones.
Asimismo, se refirió a la disputa política en relación con los medicamentos para el cáncer de mama metastásico para insistir en la necesidad de un modelo de evaluación más “sólido, abierto, predecible y participativo”, como el que se está diseñando con el RD de ETS.
Más allá de estas cuestiones, Padilla insistió en otro de sus mensajes reiterados: que las administraciones públicas deben tener un papel y “enviar señales” a los desarrolladores de tecnologías sobre la orientación de las innovaciones. A este respecto, también reiteró la necesidad de pasar de un “modelo basado en la oferta a uno centrado en la demanda” de la tecnología sanitaria.
Los retos de la Atención Primaria y los de Salud Pública, especialmente en el ámbito del tabaco, o la importancia de contar con unos Presupuestos Generales del Estado completaron la visión que Padilla ofreció a la audiencia.