La vacunación, una herramienta eficaz y segura para prevenir las principales infecciones respiratorias

La vuelta a la normalidad después de un periodo pandémico de menor contacto con virus y bacterias respiratorias plantea un nuevo escenario de menor desarrollo de inmunidad frente a estos patógenos y de mayor acúmulo de personas susceptibles de contagio que suponen una amenaza para la salud. En este contexto, las infecciones por SARS-CoV-2 han sido las predominantes hasta octubre, se ha observado un mayor número de casos de virus respiratorio sincitial (VRS) y una temporada de gripe más prolongada de lo habitual. Por otro lado, infecciones bacterianas como la infección neumocócica, tanto en su forma clínica más grave y menos frecuente, la enfermedad neumocócica invasiva, como en su forma clínica más común, la neumonía neumocócica, ha aumentado su incidencia a lo largo del año 2022.

“En este nuevo escenario es posible que el SARS-CoV2 se dirija hacia una estacionalización, de forma similar a lo que ocurre con la gripe, y que en los meses de mayor frío y mayor convivencia en espacios cerrados asistamos a patología respiratoria por los tres principales agentes víricos implicados: SARS-CoV2, VRS y gripe, y a infecciones bacterianas como la infección por neumococo”, afirmó Esther Redondo, jefa de Sección del Centro de Salud y Vacunación Internacional de Madrid Salud en el Ayuntamiento de Madrid, que ha participado junto con otros especialistas en el VI Seminario para periodistas Pfizer-ANIS, ‘Vacunas: nuevos retos, nuevo escenario, nuevos avances, nueva era’.

No obstante, para Redondo hay una “buena noticia” ya que en la actualidad se dispone de vacunas seguras y eficaces “para prevenir las principales infecciones respiratorias comentadas y que resultan imprescindibles entre la población más susceptible a estas infecciones, bien por edad -los mayores de 60-65 años o los  menores de 5 años-; o bien por tener alguna patología crónica (cardiovascular, respiratoria, hepática, renal, metabólica, neurológica grave…) o por tener situaciones que comportan inmunocompromiso (deficiencias inmunológicas congénitas o adquiridas, VIH, trasplantados, personas en tratamiento con fármacos inmunosupresores…)”.

En lo que se refiere a la covid-19, los profesionales sanitarios cuentan con vacunas bivalentes adaptadas a ómicron, que es la variante que sigue circulando entre la población de forma mayoritaria y que, según los expertos, se han mostrado efectivas para prevenir casos moderados y graves de enfermedad. Además, Isabel Jimeno, responsable del Grupo de Vacunas de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG), afirmó que existen tratamientos que administrados en estadios tempranos de la enfermedad pueden evitar ingresos hospitalarios, especialmente en pacientes de mayor riesgo, y fallecimientos.

Por otro lado, Jimeno ha destacado que, dentro del arsenal preventivo de infecciones respiratorias, existen nuevas vacunas antigripales de inmunogenicidad reforzada para la gripe en mayores y nuevas vacunas antigripales de administración intranasal para niños y adolescentes. A este respecto, Jimeno, que ha recordado que la prevención mediante vacunación es una de las funciones de los profesionales de Atención Primaria, ha señalado que en los últimos meses se ha puesto a disposición de la población y de los profesionales sanitarios en nuestro país una nueva vacuna antineumocócica.

VRS: futuro prometedor

Aparte de lo anterior, Jimeno y Redondo han apuntado que hay un futuro muy cercano y prometedor de vacunas frente al virus respiratorio sincitial (VRS) tanto en la mujer embarazada, para prevenir la infección en los primeros 6 meses de vida del recién nacido, como de nuevas vacunas frente al VRS dirigidas al adulto mayor.

Sobre esta cuestión se ha pronunciado Federico Martinón, jefe del Servicio de Pediatría del Hospital Clínico Universitario de Santiago de Compostela, quien ha comentado que el VRS hace daño a los niños, especialmente a lactantes, pero también afecta a adultos y que hace falta mayor concienciación sobre esta infección. “Las infecciones por VRS se han duplicado prácticamente este año, tras la pandemia, una infección que ya sabíamos que provoca el ingreso hospitalario de 1 de cada 50 lactantes infectados en su primer año de vida. Existen actualmente soluciones ya disponibles y en vías de estarlo que esperamos ayuden a controlar este problema de salud pública”, detalla el experto.

Nuevos avances en el calendario

Por su parte Jaime Pérez, presidente de la Asociación Española de Vacunología (AEV), se ha mostrado satisfecho con las novedades ya disponibles o que pronto llegarán para aumentar la protección frente a las enfermedades infecciosas y ha admitido que España cuenta con un calendario de vacunación “muy completo” y que lo más necesario ahora es conseguir aumentar las coberturas vacunales en grupos de riesgo y en población adulta.

“No debemos ser complacientes con las coberturas que tenemos en la actualidad y debemos vigilar mejor las coberturas de vacunación de nuestros adolescentes para que no quede ningún grupo sin vacunar. Además, es necesario seguir evaluando las novedades vacunales que lleguen porque puede ser conveniente su incorporación en el calendario”, ha advertido Pérez, mencionando además que las enfermedades infecciosas siguen siendo una de las mayores amenazas que tiene la Humanidad y que, por este motivo, en el marco de la Semana Mundial de la Inmunización, “es importante recordar que las vacunas son grandes aliadas y un avance de la ciencia que nos permite a todos llevar una vida más saludable”.

A este respecto, ha querido incidir en la importancia de concienciar adecuadamente a adolescentes y adultos ya que los logros de vacunación pasados no aseguran resultados siempre. “Hay que insistir en aumentar las tasas”, por lo que ha abogado por iniciativas tendentes a recaptar a las personas y actuar con citación activa de los que hayan omitido alguna inmunización.

Por su parte, Martinón ha considerado que es necesario “inculcar los valores de las vacunas desde la infancia”. Según él, se trata de un “asunto de Estado”, por lo que ha abogado a que se tome en serio esta cuestión desde el ámbito educativo y que se instruya a los niños, “igual que se hace con la educación vial, los valores cívicos o la sostenibilidad del planeta”.

Innovación en vacunas

Finalmente, Cristina Méndez, directora médica de Vacunas de Pfizer, ha puesto de relieve el compromiso de la compañía por cuidar la salud de las personas y reducir el impacto de las patologías graves durante todas las etapas de su vida, como la enfermedad meningocócica y neumocócica. Para ello, según ha indicado, en Pfizer están trabajando en mejorar el acceso a herramientas de inmunización que permitirán terminar con la desprotección frente a enfermedades infecciosas de alto impacto prevenibles mediante vacunación.

En este sentido, Méndez ha destacado que recientemente la prestigiosa publicación The New England Journal of Medicine (NEJM) ha publicado los resultados de fase 3 de los estudios de Pfizer MATISSE y RENOIR, referentes a su candidata a vacuna frente al VRS. “Estos estudios concluyen que nuestra candidata a vacuna administrada durante el embarazo es eficaz contra la enfermedad grave de las vías respiratorias inferiores asociada al VRS en lactantes y que también previene la enfermedad del tracto respiratorio inferior asociada al VRS y la enfermedad respiratoria aguda asociada al VRS en adultos mayores de 60 años de edad, respectivamente”.

Méndez ha explicado que la Agencia Europea de Medicamentos ha otorgado la autorización acelerada a esta vacuna que podría estar disponible en unos pocos meses.

Asimismo, la directora médica de vacunas de Pfizer ha afirmado que la compañía sigue investigando en vacunas ARNm de nueva generación, cuyo abanico de posibilidades continúa para maximizar el rendimiento de este tipo de tecnología, y sigue apoyando el diseño de vacunas novedosas que permitan ampliar la cobertura, por ejemplo con las combinaciones de vacunas, y mejorar los índices de eficacia en infecciones bacterianas que Pfizer lleva décadas ayudando a prevenir, como es el caso de la vacuna antineumocócica conjugada veintevalente y la vacuna antimeningocócica tetravalente.