“El uso de datos en la atención sanitaria tiene el potencial de revolucionar la forma en que se prestan los servicios de salud, mejorando tanto la calidad como la eficiencia de los sistemas en todo el mundo”, ha asegurado este martes la consejera de Salud de la Junta de Andalucía, Catalina García, quien ha manifestado que la comunidad está “impulsando la Inteligencia Artificial (IA) para, mejorar la calidad y la eficiencia de los servicios de salud”.
La consejera ha realizado estas manifestaciones en la inauguración del Congreso nacional sobre innovación mediante el uso de datos sanitarios, Innodata 2023, celebrado en Sevilla, que en su primera edición abordará las posibilidades de mejora en la gestión y evaluación sanitaria a través de la innovación en el uso de datos.
García asegura que Andalucía “es líder, junto a la Comunidad Valenciana, con el Grupo de Trabajo 7 del Perte de Atención Primaria, centrado en sistemas de soporte a la decisión y casos de uso de inteligencia artificial”. Dentro de este proyecto, según ha dicho, se trabaja en estándares para facilitar el intercambio de experiencias y casos de uso entre diferentes comunidades autónomas.
“Seguro que aprenderemos que la IA en el ámbito asistencial y gestión sanitaria, como la tecnología, puede mejorar la calidad y eficiencia de los servicios de salud, beneficiando tanto a los pacientes como a los profesionales sanitarios”, ha indicado.
Igualmente, ha subrayado la experiencia en el uso de modelo de datos común OMOP, modelo que permite a los investigadores y profesionales de la salud compartir y analizar datos de diferentes fuentes y sistemas de información de manera estandarizada y homogénea. Esto facilita la colaboración entre instituciones y la realización de estudios clínicos a gran escala, lo que a su vez contribuye a mejorar la calidad y eficiencia de los sistemas de salud.
“La digitalización y la interoperabilidad de los registros médicos electrónicos, junto con los avances en tecnología de la información y análisis de datos, han permitido que estos datos se utilicen de manera más efectiva. Los análisis de datos permiten a nuestros profesionales de la salud identificar patrones y tendencias en la salud de los pacientes. Esto puede llevar a diagnósticos más precisos y tratamientos más efectivos”, ha agregado.
Asimismo, ha hecho referencia a la investigación y uso secundario de datos. En este punto, ha destacado que Andalucía será la comunidad autónoma piloto del proyecto nacional PROA App, liderado por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios y el Ministerio de Sanidad, que busca compartir datos clínicos relevantes en tiempo real para ejecutar procesos consensuados a nivel nacional y poder ofrecer a los equipos de Programas de Optimización de Antimicrobianos (PROA) las recomendaciones necesarias para ejercer mejor su labor.
“Los datos son esenciales en la investigación clínica y el desarrollo de nuevos tratamientos y medicamentos. Los ensayos clínicos se benefician de la recopilación y el análisis de datos para evaluar la eficacia y la seguridad de nuevas intervenciones médicas. La medicina de precisión, que se basa en datos genómicos y moleculares, permite tratamientos personalizados y más efectivos”, ha añadido.
En cuanto a la optimización de recursos y procesos sanitarios, ha considerado fundamental explorar sobre cómo hacer un uso innovador de los datos sanitarios para mejorar la eficacia y eficiencia en la prestación de nuestros servicios, así como sobre la evaluación de tecnologías sanitarias, incluyendo aspectos clave como la evaluación económica y la evaluación de la ciberseguridad de los sistemas de información que dan soporte a las nuevas tecnologías.
“Juntos, podemos mejorar la gestión y evaluación sanitaria a través de la innovación en el uso de datos, y así contribuir a la creación de sistemas de salud más eficientes, efectivos y sostenibles”, ha concluido.