La comisión de investigación del Congreso sobre la gestión del proceso de vacunación contra la covid ha vuelto a sufrir un nuevo vaivén en su corta pero ajetreada vida. Hoy tras la celebración de su sexta y probablemente, una de sus últimas sesiones, se ha informado desde su propia Mesa, el órgano que se encarga de revisar y adjudicar a los comparecientes, que se amplía el plazo para que los grupos políticos puedan incluir más comparecientes.
La noticia no ha dejado de ser negativamente calificada por varios grupos, después de que, ya desde su nacimiento, en noviembre, PP, Vox y Ciudadanos protestaran anunciando su no participación y la calificaran de “paripé”. La razón era clara. Un acuerdo, al menos tácito entre PSOE y Unidad Podemos, vetó la intervención en la comisión de los comparecientes propuestos por esos partidos, entre los cuales se encontrar personas como el anterior ministro, Salvador Illa o el director del Centro Coordinador de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón.
Desde la oposición se reaccionó asegurando que la comisión “nacía muerta” y dejando la misma desierta de grupos. Es este mismo lunes, en la sexta sesión, solo estaban presentes el grupo socialista, el Unidas Podemos y del Grupo Plural. Para muchos, una imagen muy negativa sobre una comisión tan importante para la gestión política de la pandemia.
En principio, las comparecencia se deberían cerrar este martes, con la última serie de intervenciones, a la que se podría añadir otra más si el próximo jueves, los partidos quieren presentan algún nombre más. Por el momento, el PP, ha planteado que llamará de nuevo a toda la lista que presentó en noviembre y queda aún la duda si el resto de grupos llamarán a algún otro ponente. Tras celebrarse esta última sesión se cerrarán las comparecencias, que empezaron el pasado 29 de noviembre.
La justificación desde la Mesa, la da el presidente de la comisión de investigación, el socialista Guillermo Meijón, quien ha indicado que primeramente se quiso empezar los trabajos con los comparecientes que figuraban en la lista elaborada por PSOE y Unidas Podemos y abrir después la posibilidad de llamar a otras personas.
Una visión que no es compatible con la actitud que muestran otros grupos y que conduce a que esta comisión de investigación cerrará sus trabajos sin haber ahondado en uno de los motivos que la originaron, que no fue otro que las vacunaciones irregulares de alcaldes y responsables políticos y sociales.
El carácter de la comisión ha derivado hacia un criterio más técnico en el que no han aparecido hasta el momento ningún cargo del más alto nivel político de la Administración. Mª Jesús Lamas, directora de la Aemps, o los directores del ISCIII y la directora de Salud Pública, Cristóbal Belda y Pilar Aparicio, son los principales cargos. Igualmente las afluencias han sido un poco enlatadas. En seis sesiones han pasado 15 comparecientes, prácticamente el doble de lo que suele ser habitual.
La sexta jornada celebrada este lunes no ha cambiado mucho el guión al esquema de los anteriores encuentros, cuatro comparecientes seguidos, y como oyentes representantes de tres partidos políticos: PSOE, Unidas Podemos y el Grupo Plural (en este caso Inés Sabanés de Más Madrid).
Como comparecientes los directores generales de Salud Pública de Extremadura, María Pilar Guijarro, Andalucía, José María de Torres, y Galicia Carmen Durán. Junto a ello, el profesor honorario de la Universidad Autónoma de Barcelona, Joan Laporta.
Precisamente era Laporta el encargado de abrir la sesión, con un mensaje crítico hacia las políticas de vacunación y especialmente hacia los mensajes del Gobierno de España en relación a la vacunación, que han provocado que las intervenciones de los grupos se centrara en salvaguardar el papel de las vacunas y del Gobierno en la vacunación.
Laporta ha criticado que las compañías farmacéuticas “han falseado los datos de eficacia de las vacunas”; que la mortalidad en las residencias ha superado con mucho lo que se ha informado y que otras cuestiones y medias de prevención, como el pasaporte Covid, no sólo “no ha evitado contagios”, sino que “puede incluso haber contribuido al aumento de casos”, porque a su entender “aportaba una falsa sensación de seguridad”.
Las intervenciones de los directores generales han corrido en un sentido muy diferente, centra específicamente en dar cuenta de cómo se ha desarrollado el plan de vacunación en sus respectivos territorios.
Mª Pilar Guijarro ha destacado en su intervención, “la solidaridad y la colaboración que ha existido entre todas las CC.AA.”. El andaluz De Torres Medina ha sido un poco más incisivo con la acción del Gobierno de España recordando que “Andalucía ha recibido menos vacunas que las que por población le correspondía”, durante una buena parte de la pandemia y ha reclamado que como lección para el futuro, la necesidad de “tomar una ley de pandemias”, para el conjunto del país, así como una nueva estrategia de vacunas, entre otras cuestiones. Por su parte, Carmen Durán ha indicado que las decisiones de la Comisión de Salud Pública se deberían haber tomado “por consenso y no por votación” e igualmente ha mostrado favorable a trabajar “desde una auténtica gobernanza compartiendo las decisiones”.