El que fuera portavoz de Sanidad de Ciudadanos en el Congreso de los Diputados durante la última legislatura, Francisco Igea, ha concedido una entrevista a Diariofarma, a pocos días de las elecciones del 28 de abril, para desgranar algunas de las propuestas y las visión de la formación naranja en materia de gestión sanitaria y de la prestación farmacéutica. Igualdad de derechos y transparencia son los ejes vertebradores de su discurso y su programa.
Pregunta. Una de las medidas que contempla el programa de Ciudadanos para estas elecciones generales, y que el candidato a la presidencia ha sacado en los debates, es la de la tarjeta sanitaria única, de la que ya había algún proyecto por ahí, como decía Pablo Casado.
Respuesta. Se confunde la tarjeta sanitaria única con la receta electrónica y la historia clínica interoperables, en las que sí se ha avanzado en los últimos tiempos. Lo que nosotros proponemos con esto es que a ningún paciente se le trate como desplazado en ningún territorio, que los ciudadanos puedan moverse libremente y, cuando lo necesiten, se les atienda con el simple hecho de mostrar, sin que se tenga que abrir un proceso burocrático, sin que sufran demoras, se les nieguen pruebas… Todo eso está pasando actualmente y los españoles lo saben. No se puede mirar para otro lado.
P. Otra propuesta, la del calendario vacunal único, se ha hecho realidad recientemente. ¿Qué proponen ustedes, concretamente?
R. Lo que proponemos es que haya un calendario único para todas las comunidades autónomas y que ninguna se lo salte, como han hecho algunas autonomías gobernadas por el Partido Popular. Esto no puede convertirse en un concurso entre consejerías cuando se acercan las elecciones. El calendario vacunal se tiene que decidir en el marco del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), en función de los que marquen los expertos en Salud Público. Lo otro es meter la salud pública dentro de la oferta electoral, y eso es inaceptable. En esta misma línea, hemos propuesto que haya una cartera de prestaciones única, aunque ahí nos hemos encontrado con la oposición de PP y PSOE. Por eso me parece el colmo que ahora hable el PP de que quiere establecer esa cartera de prestaciones única.
P. Otra de las prioridades establecidas en el programa de su partido es la reducción de las listas de espera. Se trata de un objetivo bastante común, pero ¿cuál es la receta de Ciudadanos?
R. El objetivo tiene que ser el de mejorar el rendimiento y la eficiencia del SNS, que, como ocurre en muchas CCAA, las personas puedan elegir entre ir a un hospital u otro, aunque para eso hace falta más transparencia, para conocer cuáles son los hospitales más y menos eficientes. La transparencia es también esencial para luchar contra las listas de espera.
P. ¿Creen que el alivio de las listas de espera pasa por el uso exclusivo de los recursos públicos o abren la puerta a los que ofrece la privada?
R. Nosotros abogamos por la gestión directa y, si con ésta no es suficiente, por concertar servicios, siempre y cuando se cumplan niveles de calidad. Hay que reconocer que en la gestión directa hay cosas mejorar, sobre todo en materia de transparencia. Nosotros nunca hemos estado en contra de aprovechar los recursos que ofrece la sanidad privada. Todas las fórmulas de gestión pueden ser exploradas. Lo que importa es que el control sea público, transparente, con unos estándares de calidad que obliguen a todos los centros por igual. Hemos trabajado con Facme y otras organizaciones para establecer unos indicadores transparentes y obligatorios para todos, de modo que se asegure la calidad y podamos dejar a un lado el debate demoagógico.
P. ¿Basta con la financiación actual para reducir las listas de espera o hace falta un incremento presupuestario?
R. Siempre he defendido que hay que aumentar la financiación, que España esté en el entorno de los valores de la OCDE.
P. Podemos y PSOE proponen elevar el gasto sanitario al 7,5 y al 7,2% sobre el PIB, respectivamente. ¿Se moja usted con alguna cifra?
R. Lo importante, en ese caso, es que crezca del PIB. Lo contrario sería dar cifras mágicas. Lo más razonable es que la economía crezca y, a partir de ahí, se le pueda asignar un presupuesto más sensato a la sanidad.
P. En este punto, cabe recordar que está pendiente la reforma del modelo de financiación autonómica.
R. Es fundamental. Lo que no puede ser es que haya diferencias entre CCAA del 60%. Donde estamos nosotros, estamos trabajando para unificar esos niveles. Pero además de eso es preciso reformar el modelo para acabar con los privilegios de algunos… que no tengamos un cálculo del cupo tan desigual como el que hay ahora, que no haya CCAA que disponen de un presupuesto mayor dedicando menos esfuerzo presupuestario en proporción que el resto.
P. ¿Cómo sería la reforma ideal del modelo de financiación autonómica que plantea Ciudadanos?
R. Pues una cosa muy lógica sería que comunidades como Castilla y León dispongan de un gasto superior por habitante que otras como Madrid, por una cuestión de dispersión, por ejemplo. Para llevar a cabo esa reforma lo primero sería recalcular el coste de los servicios en cada territorio, que es diferente, y asegurar unos servicios de calidad para todos, con una cartera homogénea. También hay que calcular la dispersión, la edad media de la población y otras características que hacen la gestión más compleja en unos territorios que en otros. Todo eso hay que ponerlo encima de la mesa. Para eso están los expertos. Somos partidarios de que es proceso lo lidere un panel de expertos, aunque, cuando más profesionalizado y más objetivo, mejor.
P. En relación con el copago farmacéutico, llevan en su programa la creación de un Fondo de Garantía de Medicamentos. ¿Cuál es su idea?
R. Lo que hemos dicho con respecto al copago es que no puede ser una barrera para el acceso. En su día propusimos toparlo para tarjetas tipo 3, de ciudadanos con ingresos inferiores a los 12.000 euros. Es algo parecido a la medida que pretendía impulsar el Gobierno, aunque al final no se aprobó, al caer los presupuestos. Más que si la persona es pensionista o no, para recalcular el copago y garantizar el acceso a los tratamientos lo que se tienen que analizar son cuestiones como si son familias monoparentales, si cuentan con familiares dependientes a cargo, así como los niveles de renta.
P. De alguna manera reconoce usted problemas de adherencia por el copago. El PP, en cambio, sigue defendiendo su modelo, porque dice que es más justo.
R. De que hay problemas de adherencia como consecuencia del copago hay evidencia científica. En esos estudios se ven diferencias en función del nivel de ingresos. Nosotros nos apoyamos en la evidencia, aunque el PP niegue la mayor.
P. Como al resto de candidatos, me gustaría preguntarle por fórmulas para controlar el gasto farmacéutico. ¿Con cuál se sienten más cómodos en Ciudadanos?
R. Creemos en la necesidad de ir a un sistema nuevo de pago por valor. Creemos que es esencial para asegurar la sostenibilidad y queremos evitar que las decisiones se vean influenciadas por meras decisiones políticas o por periodos electorales. Hay que crear y dotar adecuadamente una agencia de evaluación, con profesionales alejados de la vida política que determinen el coste asumible de las prestaciones.
P. Ha estado usted muy presente en todo el proceso vivido en Madrid en relación con la Ley de Farmacia, donde se intentó impulsar la participación de la oficina de farmacia en el seguimiento farmacoterapéutico de los pacientes, así como en la atención domiciliaria. Usted ha defendido en alguna ocasión que los avances que se puedan hacer en ese sentido tendrán que ser a nivel nacional, no a nivel de comunidad autónoma. ¿Puede explicar la postura de su partido en relación con estos temas?
R. Sigo pensando que no podemos establecer diferencias entre las prestaciones que ofrecen las distintas comunidades autónomas. Los ciudadanos no lo entenderían. Eso no quiere decir que no pensemos que se puede avanzar en la colaboración de las oficinas de farmacia con el SNS. Así lo expusimos en las enmiendas a esa ley. No obstante, algo que tenemos claro es que las leyes no se hacen pensando en los farmacéuticos, ni en los enfermeros, ni en ningún colectivo en concreto. Se tiene que legislar siempre pensando en la ciudadanía y buscando el consenso entre las partes afectadas. Dicho eso, insisto: pensamos que las farmacias pueden aportar más, especialmente en zonas más desplobladas por ejemplo. Sería un absurdo que, en un SNS con falta de personal y recursos, desperdiciáramos los que nos proporcionan las oficinas de farmacia.
P. Como han hecho el resto de representantes, puede terminar con un mensaje, el que desee.
R. Solo decir que estamos convencidos que Ciudadanos, en materia de sanidad, es el único partido que garantiza la igualdad de los españoles ante la ley y la igualdad en el acceso a las prestaciones. Somos la única formación que ha planteado esa cartera única, que ha trabajado en todas las CCAA en la misma línea. Los demás han dicho muchas cosas, pero no han aportado nada.